Todos los veranos saco mis moldes para helados favoritos y empiezo a rescatar las recetas del año anterior que triunfaron entre todos los miembros de mi familia. Junto a ellas, voy probando otras nuevas, creando así un auténtico recetario de helados ricos, pero siempre saludables. De hecho, quizás es esto último lo que me ha hecho ser fan número uno de los helados caseros.
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Para hacerlos, he pasado por todo tipo de moldes, diseños y tamaños, pero siempre tenía varios problemas con ellos: o bien se derramaban dentro del congelador y tenía que hacer una auténtica obra arquitectónica para sostenerlos, o bien no conseguía desmoldarlos sin romperlos o, al limpiarlos, quedaban restos en su interior. Hasta que descubrí estos de Lékué, con una relación calidad-precio excelente y que ya no voy a cambiar. Sinceramente, es una compra que te recomiendo al 100%.
Cada semana te traemos la compra ideal para tu hogar: productos que transforman tu casa en un lugar práctico, acogedor y con alma. Porque mereces vivir en un espacio que te inspire.
