Bebé con manchitas rojas en la cara tumbado y mirando a cámara©AdobeStock

Salud

¿Sabes qué son los exantemas virales y cómo se tratan?

Son lesiones que aparecen en la piel causadas, principalmente, por un virus y, en su mayoría, no presentan peligro. Las más específicas son las causadas por la varicela o el sarampión, por ejemplo, aunque hoy son menos frecuentes gracias a las vacunas. Pero se suelen manifestar de distintos tamaños y formas e ir acompañadas o precedidas de fiebre.

La mayoría de los exantemas suelen manifestarse en la infancia, de hecho, son una de las consultas más frecuentes en pediatría. Gran parte de los casos que se presentan con exantemas suelen ser de origen infeccioso y las enfermedades que cursan con estos son numerosas.

Pero para saber qué son exactamente los exantemas, hemos hablado con la doctora Amparo Quiles, (@amparoquilespediatra) pediatra y Cofundadora del proyecto basado en la crianza respetuosa @anid.ando, quien nos explica: “Los exantemas son erupciones en la piel, coloquialmente llamadas ‘salidas’, y una de las causas principales son las infecciones por virus, por tanto, un exantema viral es la aparición de lesiones en la piel como consecuencia de un virus. Algunos producen exantemas más específicos como la varicela, el sarampión o la rubeola, todos ellos últimamente menos frecuentes gracias a las vacunas”, de ahí la importancia de tener al día el calendario vacunal de los peques.


¿Cuáles son los síntomas y cuándo acudir al pediatra?

Normalmente, las manchas suelen ser de color rojo, de tamaño variable, de presentación cambiante y constituyen un signo clínico que puede ayudar a diagnosticar la enfermedad que lo origina.

La pediatra nos cuenta que “normalmente aparece en una o varias zonas de la piel algún tipo de lesión que pueden ser desde manchas no palpables, habones palpables como la urticaria, granitos o manchas pequeñitas, incluso vesículas. Pueden acompañarse, o incluso ir precedidas, por fiebre que puede ser alta (39 grados o más)”. El primer paso para el diagnóstico será determinar si su origen es infeccioso o no, mientras que para esto la fiebre será un dato crucial ya que su ausencia puede llevar a excluir el origen vírico del exantema.

Entonces, si sospechamos que nuestro hijo puede tenerlo, ¿cuándo debemos acudir al pediatra? “En general, los exantemas víricos son autolimitados y no peligrosos y, por tanto, se resuelven solos en unos días, cuando el cuerpo supera la infección. Como siempre que aparecen manchas o fiebre, si las manchas son de color rojo vino y al apretar no desaparecen (entonces se llaman petequias) debemos consultar en el pediatra; así como cuando veamos que el aspecto general del peque no es bueno o no hay mejoría en un par de días”, recomienda la doctora.

Desde la Asociación Española de Pediatría (AEP) aconsejan que para conseguir un diagnóstico acertado se deben recoger los siguientes puntos en el historial clínico del paciente:

  • Edad
  • Datos epidemiológicos: incidencia estacional, noción de exposición o epidemiología local.
  • Exposición al sol, picaduras, estancia en áreas rurales, viajes al extranjero, ingesta de fármacos.
  • Antecedentes de enfermedades pasadas
  • Calendario vacunal
  • Estado inmunológico del paciente
  • Prácticas de riesgo en la adolescencia para posibles enfermedades de transmisión sexual.
  • Periodo de incubación
  • Características de la fiebre: cronología con el exantema
  • Características del exantema: progresión, evolución temporal, relación con administración de vacunas o fármacos y distribución del exantema.
  • Asociación con enantema.
  • Síntomas asociados
Niño sentado en su cuna con manchas rojas en la piel©AdobeStock


¿Por qué son tan habituales en niños?

Tal y como apuntábamos al inicio, los exantemas virales suelen manifestarse sobre todo en la infancia. ¿Por qué ocurre esto? Porque normalmente son parte de un proceso viral, algo extremadamente frecuente en los niños. “El sistema inmunitario de los peques está todavía aprendiendo a defenderse sin olvidarnos que, además, la higiene en estas edades es mejorable (comparten objetos, se lavan las manos menos, no se tapan al toser...) pero, por suerte, suelen ser cuadros leves”, asegura la pediatra.

Asimismo, la Dra. Quiles nos cuenta que, por norma general, “los cuadros víricos son sintomáticos” y, por tanto, su tratamiento se basa en aliviar los síntomas. Y, para tratar los exantemas “sólo deberíamos hidratar la piel y, en caso de picor podemos tomar algún antihistamínico. Si hay fiebre o malestar podemos usar antipiréticos como el paracetamol”, recomienda.