Está de más decir que no hace falta llevar taconazo para lucir superlegante, ahora que el calzado plano se ha colado en absolutamente todos nuestros looks, desde la oficina hasta las salidas de fiesta. Y si bien esto nos ha traído muchísimos beneficios, algunas de nosotras -por expertas que seamos en las últimas tendencias- hemos olvidado cómo caminar en stilettos, así que nos decantamos por una versión más modesta, la misma que antes se asociaba con las adolescentes que buscaban imitar a sus madres. Los llamados kitten heels, a caballo entre las bailarinas y los tacones de aguja, han llegado a nuestras vidas para simplificarlas sin por ello dejar de lado la sofisticación del clásico zapato de salón.
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