Una vez finalizados los compromisos oficiales de la coronación de Carlos III, los príncipes de Gales hicieron una aparición sorpresa en la fiesta del jardín del Palacio de Buckingham, a la que asistieron casi 8.000 personas, aunque ninguna acaparó tantos focos como Kate Middleton. Su look era repetido, nada que no le hubiésemos visto antes, pero se trataba de uno de sus más aclamados. Nos referimos a esta blusa con lazada al cuello, detalles de macramé y transparencias sobre las mangas y el escote, que lució a juego con una falda midi de tul. Sobre su cabeza, un tocado ladeado de flores cerraba el estilismo que, para sorpresa de nadie, se hizo viral en cuestión de minutos. ¿Pero qué tiene de especial? Lo cierto es que, en él, está la clave de la Princesa para adaptar las tendencias más sensuales al rígido protocolo real, un atrevimiento en el que pocas royals incurren.
- Inspírate en la realeza para ser la invitada perfecta