Como mencionábamos, no es la primera vez que aparece con este majestuosa obra de arte. Para la cena de gala que compartió con la reina Isabel II de Inglaterra en el Palacio de Buckingham en 2018, también confió en el poder de esta reliquia familiar que lleva siglos en el país. Aunque debemos recordar que el gran diamente que da nombre a la tiara, fue un regalo del príncipe Guillermo III de Orange a su mujer, la reina María II de Inglaterra, en 1690.