Madrid fue anoche el escenario de una de esas veladas que devuelven el glamour a su significado original. En un encuentro donde la alta cultura y la alta joyería se fundieron bajo el mismo destello, Bvlgari convocó a la élite del cine, la moda y la creación contemporánea en una celebración que convirtió el arte en una experiencia sensorial. La Maison romana, con más de 140 años de historia, desplegó su savoir-faire en una noche que rindió homenaje a la belleza atemporal y a la excelencia artesanal.
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El recorrido comenzó con un cóctel de bienvenida seguido de una visita privada a obras maestras del arte universal. Después, una cena exclusiva en un enclave reservado de la capital: bailarinas engalanadas con piezas icónicas de Bvlgari y actuaciones de las cantantes italianas DIV4S. Entre los invitados, nombres que resumen el mapa de la cultura española actual —Pedro Almodóvar, Rossy de Palma, Isabelle Junot, Pepe Barroso, Milena Smit o Nieves Álvarez— compartieron mesa y arte en una noche inolvidable.
La aristócrata e influencer, que en los últimos años se ha consolidado como una de las presencias más carismáticas del panorama social madrileño, encarnó a la perfección el espíritu de la velada con un total look en color negro. Casada con Álvaro Falcó, heredero del marquesado de Cubas, Isabelle es un rostro habitual en los eventos de moda y arte de la capital. Anoche apostó por una blazer oversize como vestido, unas botas altas de tacón, bolso de fiesta con brillo y joyas de la Maison.
La supermodelo española por excelencia, con más de tres décadas de carrera internacional, volvió a deslumbrar con un vestido de fiesta en color negro: palabra de honor, con transparencias y lentejuelas. Presentadora, empresaria y musa eterna de diseñadores como Stéphane Rolland, Nieves representa la elegancia atemporal. Para completar el look, optó por unos zapatos de tacón negros, un bolso del mismo tono y joyas de Bvlgari.
Actriz camaleónica y una de las voces más potentes del nuevo cine español, Milena llevó su habitual aura enigmática a la gala con un vestido de tirantes de color negro, con volantes y transparencias, combinado con unas sandalias de tacón, un bolso de mano de piel y joyas de Bvlgari. Desde Madres paralelas hasta La chica de nieve, la intérprete ha convertido cada aparición pública en un ejercicio de estilo propio, con una estética audaz que encaja con el espíritu más contemporáneo de la Maison.
Empresario, modelo y actor, Pepe Barroso representó la elegancia masculina de la noche vestido con un esmoquin negro impecable. Conocido por su trabajo en el mundo de la moda y por su papel en producciones internacionales, ha sabido construir una imagen de sofisticación joven, que encaja a la perfección con la visión moderna del lujo que Bvlgari defiende.
Musa eterna del cine almodovariano y figura imprescindible del arte performativo, Rossy de Palma fue una de las presencias más magnéticas de la noche. Su carisma —a medio camino entre la pintura cubista y la vanguardia teatral— reflejó el diálogo entre lo clásico y lo contemporáneo que definió el evento. Apostó por un vestido túnica con transparencias y detalles plateados, unas sandalias de tacón en color negro, bolso de fiesta y joyas de Bvlgari.
La actriz añadió un toque de refinamiento a la velada madrileña con un vestido negro de piel, con escote palabra de honor y falda plisada. Lo combinó con unas sandalias doradas y joyas de la firma. Con una carrera que transita entre el teatro, el cine y la televisión, Aitana Sánchez-Gijón representa la madurez del arte interpretativo español. Su serenidad y porte clásico encajaron con la atmósfera de la noche.
Inquieta, magnética y absolutamente rebelde, Najwa Nimri se movió por el evento como una nota disonante que hace perfecta una melodía. Actriz y cantante, icono del riesgo estético y del misterio, su presencia aportó un matiz fascinante a la celebración. Deslumbró con un vestido satinado de color blanco, adornado con plumas, una imagen que recordó a las musas del cine clásico de Hollywood. Lo combinó con joyas de la firma.
Modelo en ascenso dentro del panorama internacional e influencer, Blanca Soler aportó frescura y naturalidad a la velada de Bvlgari. Con una elegancia joven, representa a la nueva generación de maniquíes que combinan belleza clásica y actitud moderna. Lució un vestido largo en color bronce, con un escote muy pronunciado, que combinó con joyas de la Maison.
La velada, además de una exhibición de joyas, fue un encuentro donde la conversación, las risas y los gestos cómplices de los invitados dieron vida al lujo. Entre brindis y selfies, las invitadas compartieron historias y miradas cómplices.
Un rincón especialmente preparado de la velada que combinaba arquitectura y decoración y evocaba la estética de un museo contemporáneo. Desde Pedro Almodóvar hasta Milena Smit, todos posaron con naturalidad, como si el escenario hubiera sido diseñado exclusivamente para ellos.
Cada detalle de la cena fue concebido como una obra de arte: manteles, vajilla y centros inspirados en la escultura clásica, iluminados por la cálida luz que transformaba el salón en un escenario íntimo y majestuoso a la vez. Las actuaciones de las DIV4S y de las bailarinas, portando joyas icónicas de Bvlgari, convirtieron cada instante en un viaje sensorial, donde música, movimiento y diseño se fundieron en perfecta armonía.