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Te sientes apática, decaída, tal vez más cansada de lo normal… Puedes estar frente a un episodio de astenia, muy habitual en esta época del año. "Es el conjunto de síntomas que los pacientes refieren en forma de cansancio, falta de energía vital, anhedonia de forma pasajera durante el periodo de cambio de estación a primavera", nos cuenta el doctor Julián Ruiz Baixauli, especialista en Medicina Interna del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, que añade que afectan tanto a la esfera física como intelectual.

 

¿Hay personas con mayor riesgo de padecer el problema? "Es difícil establecer los parámetros diagnósticos en sintomatología tan variada y subjetiva. Pero, en general, es más común entre mujeres que hombres y en aquellos que han padecido episodios previos. También es más común entre personas con estrés laboral y emocional intenso junto con un entorno de soledad en franja de edad media: jóvenes y adultos", nos explica.

 

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Síntomas de alerta

¿Qué síntomas nos pueden indicar que padecemos astenia? Hay que estar especialmente vigilante ante la aparición de los siguientes:

-La principal sintomatología es la sensación de cansancio constante, apatía, sentirse como si tuvieran las pilas agotadas.

-Esta falta de energía impide concentrase, cansancio fácil junto con percepción de invertir más tiempo y esfuerzo a la hora de realizar tareas cotidianas.

-Pueden coincidir sentimientos de tristeza, nostalgia junto con manifestaciones físicas de agotamiento.

 

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¿Cuáles son las causas de astenia?

El especialista nos comenta que no se ha definido una etiología clara. "Entre las causas de la astenia se han postulado con relación a los cambios hormonales secundarios a los estímulos externos ambientales propios del cambio de estación, los biorritmos alterados con cambios del ritmo circadiano por modificaciones horarias, estímulo lumínico con la liberación de la melatonina, temperatura, humedad, presión atmosférica, horarios de ingesta", nos resume.

 

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¿Se puede prevenir?

Le preguntamos al doctor por las estrategias que nos pueden ayudar a anticiparnos a la astenia y evitar sus síntomas. Y nos los resume en los siguientes:

-Principalmente intentar mantener actitud positiva, optimista.

-Hacer hincapié en la importancia de seguir un estilo de vida saludable, dieta equilibrada, evitar tóxicos, realizar actividad física mantenida o conservar horarios de vigilia/sueño.

-Además, deberíamos proyectar objetivos a corto plazo placenteros como mecanismo de recompensa en situaciones de estrés laboral intenso.

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Hábitos de nuestro día a día

Le preguntamos al doctor Julián Ruiz Baixauli sobre si hay remedios caseros que puedan sernos de utilidad, y nos detalla que los estimulantes habituales tipo café o té, así como la cafeína pueden aportar beneficios puntuales, pero la fluctuación de la sintomatología a lo largo del día puede conllevar a que esos mismos estimulantes empeoren la sintomatología al alterar el sueño o la concentración, así como intensificar la ansiedad por dicha astenia.

Mientras, sí que considera que los hábitos del día a día tienen la capacidad de influir, y mucho, en el control de los síntomas de la astenia. "Así, comer sano es la mejor receta frente a la astenia. Evitar la deshidratación, cambios bruscos de temperatura, exposición prolongada al sol son medidas preventivas muy recomendables en este tipo de pacientes. Comer bien, dormir bien, actividad física diaria son las recomendaciones habituales", concluye el doctor.

 

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