1/11 © Adobe Stock

Hay determinados alimentos que no deberían faltar en tu nevera. Y nadie mejor que un experto en nutrición para resumirnos cuáles son esos productos que no pueden faltar en nuestra despensa si queremos seguir una dieta sana y saludable. Las frutas y las verduras cuentan con un lugar privilegiado en esa lista, pero hay más. El nutricionista Ángel Soriano, miembro de Doctoralia, nos ha resumido cuál es su decálogo de alimentos básicos, esos que siempre están en su lista de la compra.

 

Lee también: ¿Y si comer frutas y verduras te hiciera más feliz?

2/11 © Adobe Stock

Aguacate

Son una de las fuentes de grasas saludables por excelencia. Su contenido en grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas lo convierten en un alimento muy recomendable, ya que ayuda a reducir el colesterol y los triglicéridos, tiene poder saciante y contribuye a mejorar la elasticidad de la piel. A pesar de ser un alimento rico en grasas, el experto nos cuenta que hay estudios que han demostrado que el consumo frecuente de aguacate ayuda a reducir la grasa abdominal.

 

Lee también: Las propiedades del aguacate para que estés más guapa (por dentro y por fuera)

3/11 © Adobe Stock

Copos de avena

El nutricionista nos explica que la avena es un producto totalmente natural, sin procesar (a diferencia del resto de cereales de desayuno). Por lo tanto, hablamos de un alimento muy nutritivo, rico en minerales como el magnesio o el hierro, así como en fibra, con un buen aporte de proteínas y sus carbohidratos son de absorción lenta, por lo que unido a la fibra, aporta saciedad durante más tiempo y ayuda a evitar el picoteo.

 

Lee también: ¿Por qué es una gran idea incluir la avena en tu alimentación?

4/11 © Adobe Stock

Alimentos colagogos

Son aquellos que favorecen la función del hígado, y entre ellos podemos citar la alcachofa, la rúcula, el brócoli, la col y otras verduras amargas que favorecen la función detoxificante natural del hígado, liberando de impurezas y toxinas. Todo ello se traduce en una mejora de la salud, en una piel perfecta y en mejores digestiones, que nos ayudarán a mantener la línea.

 

Lee también: No te olvides de la coliflor: es mejor de lo que piensas

5/11 © Adobe Stock

Semillas de chía o de lino

Ambas son semillas muy ricas en Omega 3, por lo que contribuyen a mejorar la elasticidad de la piel. Además, contienen mucha fibra soluble, que además de tener efecto saciante, limpia el intestino y mejora el tránsito intestinal, por lo que facilita la eliminación de toxinas y libera de la inflamación abdominal. 

 

Lee también: Semillas de chía y otros 'descubrimientos' para una dieta sana

6/11 © Adobe Stock

Frutos rojos

Son frutas muy bajas en calorías, ideales para quitar unas calorías de la dieta o incluso en dietas low carb por su bajo aporte en azúcares. Contienen polifenoles, unos potentes antioxidantes que van combatir radicales libres evitando así la formación de arrugas y, por lo tanto, ofrecen un efecto antienvejecimiento. Además, favorecen el crecimiento de bacterias beneficiosas de la flora intestinal, que ayudan a perder peso.

 

Lee también: Los beneficios de los frutos rojos que harán que los quieras incluir en tu dieta desde ya

7/11 © Adobe Stock

Frutos secos

Su alto contenido en grasas aporta saciedad, por lo que nos encontramos ante un tentempié ideal y nutritivo. El nutricionista nos aclara que sus vitaminas y sus ácidos grasos esenciales son beneficiosos para la piel, la flora intestinal, el sistema inmune, el equilibrio hormonal y para muchas funciones más. 

 

Lee también: Frutos secos, sí, pero hay que tomarlos con moderación

8/11 © Adobe Stock

Pepino

Este vegetal, tan típico en los meses de verano, hidrata por dentro y por fuera gracias a su alto contenido en agua y minerales.

 

Lee también: 7 propiedades del pepino que quizás desconocías

9/11 © Adobe Stock

Sandía

Es una fruta muy habitual en los meses de verano, y destaca por su altísimo contenido en agua, que ayuda a hidratar el cuerpo y la piel con un bajo aporte calórico.

 

Lee también: Frutas de verano: qué tomar y qué propiedades nutricionales aportan

10/11 © Adobe Stock

Frutas ricas en vitamina C

Entre ellas podemos destacar los cítricos, las fresas o el kiwi. La vitamina C es un elemento imprescindible para la formación del colágeno, por lo que estas frutas van a facilitar la fabricación endógena del mismo. Además, estas frutas son ricas en antioxidante, por lo que tienen un efecto antiarrugas y antienvejecimiento. Además, al ser frutas bajas en calorías ayudarán a mantener la línea.

11/11 © Adobe Stock

Zanahoria

Es un tentempié ideal, muy saciante, calma la ansiedad por comer ya que es dura y hay que morderla con fuerza. Sus betacarotenos (provitamina A) tienen un efecto fotoprotector, por lo que protegen de posible daño solar además de que favorece el bronceado. Interviene también en la regeneración de la piel.

Lee también: La zanahoria: un súper alimento ideal para el verano

Más sobre: