Las celebraciones navideñas suelen traer consigo comidas más abundantes, sobremesas largas y un ritmo de encuentros alrededor de la mesa que, aunque pueden ser muy agradables (sobre todo si, para evitar discusiones se aplica la técnica del sándwich), pueden pasar factura al sistema digestivo.
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Pero para ayudar a prevenir la típica sensación de pesadez e hinchazón de estas fechas, según las bioquímicas Elena Pérez y María Hernández-Alcalá, expertas en nutrición clínica, nutrición aplicada y salud pública, y fundadoras de Futurlife21, hay que evitar caer en un error muy común. "Saltarse comidas o comer poco para “compensar” antes de un gran banquete es una de las prácticas que más favorece la inflamación", advierten. Y ¿a qué se debe?
Según han explicado, llegar con demasiada hambre provoca una ingesta más rápida y menos consciente, generando hinchazón y sensación de pesadez. "La recomendación es mantener comidas equilibradas durante el día para llegar sin ansiedad y disfrutar sin excesos involuntarios", sostienen.
De la misma manera, intentar compensar al día siguiente solo conduce a tener ansiedad, un mayor deseo por consumir alimentos poco saludables y genera una mala relación con la comida. En lugar de restringir, las bioquímicas Elena Pérez y María Hernández-Alcalá, recomiendan volver a una alimentación nutritiva, manteniendo los hábitos saludables, y disfrutando de una comida rica preparada encasa.
Además, comparten otras tres pautas sencillas y realistas para mantener el bienestar sin renunciar a los planes navideños. Las expertas recuerdan que el objetivo no es restringir, sino encontrar un equilibrio que permita disfrutar de un modo saludable.
1. Reserva las celebraciones para los días especiales
Mantén hábitos saludables el resto de la semana. Las comidas festivas forman parte de la Navidad, pero no deben condicionar los hábitos adquiridos del resto de días. Mantenerse hidratado, priorizar alimentos frescos y moverse con regularidad, permiten que el organismo llegue a cada evento en mejores condiciones.
2. No centres estas fechas solo en comer y beber: muévete
La actividad física sigue siendo clave en Navidad. Caminar, practicar deporte suave o planear actividades en grupo al aire libre ayuda a regular el apetito, mejora el estado de ánimo y contribuye a un descanso mental. Como recuerdan desde Futurlife21, "donde el cuerpo se cansa, la mente descansa", y la Navidad, y más si tenemos días de vacaciones y más tiempo, es un momento ideal para reforzar esta dinámica.
3. No cocines solo para Nochebuena o Navidad
Apuesta por platos reconfortantes, ricos y saludables. En Navidad se suele pasar mucho tiempo en la cocina preparando platos para las grandes celebraciones. Desde Futurlife21 animan a hacerlo también el resto de días, evitando ultraprocesados o precocinados.
"Cuando no haya eventos sociales, conviene elegir opciones caseras nutritivas: guisos sencillos con quinoa, verduras y proteínas naturales, sopas ricas en nutrientes, ensaladas de colorines con vinagretas…", comentan Elena Pérez y María Hernández-Alcalá.Además, disfrutar de las comidas sabrosas pero equilibradas ayuda a mantener una microbiota estable y facilita una mejor respuesta digestiva durante los días máscopiosos.