Los soñados áticos también tienen su 'lado oscuro', te lo detallamos
Y te damos soluciones para muchos de sus inconvenientes
Ansiados por (casi) todos, parece que la pandemia y en especial el confinamiento ha hecho revalorizar todavía más a los áticos, especialmente los que cuentan con una espaciosa terraza, donde desplegar toda nuestra creatividad a la hora de amueblarla para hacerla confortable. Son muy especiales y al tratarse del último piso de una construcción, por lo general cuentan con abundante luz natural durante todo el día. Pero precisamente el hecho de ser las viviendas más altas, también cuentan con puntos negros de los que debes ser consciente antes de hacerte con uno. Arrojamos luz sobre el lado oscuro de los áticos y, también, acerca de cómo solucionar algunos problemas comunes, si son salvables.
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Más costes en climatización
No debería ser así en los edificios de viviendas de nueva construcción, pero en el caso de las que ya tienen unas décadas a sus espaldas, lo cierto es que los áticos están más expuestos a las fugas de calor (en invierno) y de frío (en verano), por lo que convendrá insistir más que nunca en un adecuado aislamiento tanto de las paredes como de los techos. Además es indispensable que las ventanas sean herméticas. De lo contrario se nos irá un buen pellizco del presupuesto doméstico en refrigerar y calefactar el piso.
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Atención a la luz
Tu vitamina D estará a tope en un ático y sí, el sol nos aporta mucha felicidad. Sin embargo para lograr un buen confort térmico te convendrá matizarlo convenientemente pues, de lo contrario, los interiores estarán expuestos a más calor y, además, los rayos terminan por aclarar el mobiliario y los textiles.
Las lamas regulables móviles o los toldos son métodos eficientes para un buen control solar. Y desde el interior puedes apostar por vestir las ventanas con dos sistemas distintos, como visillos y cortinas o bien un estor de screen u otra tela ligera junto con unas caídas de mayor espesor, como vemos en este dormitorio decorado por Natalia Zubizarreta.
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Las terrazas requieren mantenimiento
El principal problema que genera una terraza es el de su correcta impermeabilización, pues en caso contrario puede provocar goteras y humedades. Si esta cubierta plana está dañada deberá ser reparada por profesionales especializados, para garantizarte los mejores (y más duraderos) resultados, lo que es una obra costosa. La alternativa para que te salga más barata (aunque no siempre puede hacerse) es mantener el suelo existente y colocar otro encima.
Respecto a otras labores de cuidados y mantenimiento, en especial se refieren a la limpieza, pues deberás vigilar que los sumideros no se embozan y llenan de hojas, limpiar más el suelo que en el interior, así como tratar el pavimento si necesita cuidados frecuentes, como los de madera.
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Suelen escasear los metros
Aquí no hay una verdad absoluta, aunque en las grandes ciudades los áticos son pequeños (por regla general) en detrimento de la terraza. Es algo que debes valorar especialmente si resides en una localidad donde escasea el buen tiempo que hace óptimo gozar del espacio al aire libre.
En este ático en Barcelona la terraza mide 70 metros² y la vivienda tan solo 48. Lo ha reformado el interiorista Matthew Coe junto con el estudio de arquitectura Arcworld.
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¿Existen remedios para ganar metros?
El más evidente consiste en instalar un cerramiento en la totalidad o parte de la terraza, para ganar metros útiles de vivienda (es lo que ha hecho FFWD Arquitectos en la propuesta). Aunque no se pueden colocar siempre, puede haber una normativa de la comunidad de propietarios o la localidad que lo impida. Consúltalo antes de lanzarte a hacer la obra.
Además, multiplicarás la sensación de espacio si apuestas por los espacios abiertos, una reforma cada vez más solicitada.
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Más propenso a los robos
Por si no los sabías, los pisos más susceptibles de ser ‘visitados’ por los ladrones son los áticos y los bajos, al resultar más sencillo su acceso a los mismos. Así que es más que probable que los seguros del hogar resulten también más costosos.
¿Qué soluciones puedes encontrar para disuadir la presencia de estos amigos de lo ajeno? La más habitual consiste en colocar rejas que no tienen por qué estropearte las vistas si son móviles y solo cierras cuando te ausentas. Las alarmas también son un buen método para disuadir a los cacos.
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Mudanza más costosa
Si el ático tiene aparte del ascensor un montacargas, quizá la empresa de mudanzas no añadirá un sobrecoste pero de lo contrario sí, porque hay muebles voluminosos que no cabrán en el ascensor. Y si debido a su volumen o peso en lugar de subirlos por la escalera se decide hacerlo con una grúa, la altura del piso es un factor clave que aumenta el precio del traslado.
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Pagarás más por cada metro²
Aquí manda la ley de la oferta de la demanda y sí, la demanda es alta. Los áticos son codiciados porque ofrecen intimidad, mucha luz, unos exteriores de los que disfrutar prácticamente todos los días del año y, muchas veces, vistas de infarto (en la propuesta, La Errería reforma un ático en el municipio alicantino de Novelda con panorámicas a La Mola y El Cid, las cimas más importantes de la zona).
¿Cuál es la diferencia? Pues de media, según un reciente estudio de Tecnicasa (empresa dedicada a las tasaciones y valoraciones inmobiliarias), un ático es un 23% más caro que el resto de pisos.
Para este aspecto, igual que cuando hemos tratado el tema de la mudanza, no hay una solución pues, por lo general, los felices moradores de un ático no lo dejan escapar y estamos en una época (de pandemia) en la que todavía cotizan más al alza.
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