Se conocieron en septiembre de 2018, en el cumpleaños de Emiliano Suárez. Siete años después, Marta Sánchez y Federico León siguen tan enamorados y compenetrados como el primer día. ¡Si hasta se ponen de acuerdo para vestirse igual! Así lo comprobamos este domingo, 14 de septiembre, cuando vimos a la cantante y al empresario canario pasear por la Milla de Oro de Madrid. Tras unas compras, Marta y Federico tomaron el aperitivo en la terraza de Kabuki, uno de los locales de Federico, y aprovecharon la ocasión para brindar por el séptimo aniversario de su historia de amor.
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La cantante también tiene muchas cosas que celebrar. Mientras ultima los preparativos de su nuevo disco, acaba de cumplir 40 años en la música. Fue en 1985 cuando se convirtió en vocalista de Olé Olé e inició una carrera que hizo historia del pop español, gracias a temas como Soldados del amor —¿cómo olvidar su actuación para las tropas españolas, en 1990, en la Guerra del Golfo Pérsico?— o, ya en solitario, con Desesperada, Soy yo o Quiero más de ti. Quién diría que lleva ya cuatro décadas en la industria, porque, a ocho meses de cumplir los 60, Marta está estupenda.
De la misma manera, la cantante puede brindar por su hija, Paula Cabanas, fruto de su matrimonio con el empresario Jesús Cabanas: la joven, de 22 años recién cumplidos, aparece entre los 50 nombres de la Gen ¡H! por su prometedor futuro. Paula, que acaba de terminar sus estudios de Comunicación, Estilismo e Imagen de Moda en el IED, forma parte del equipo que acompaña a su madre en los conciertos: ayuda a Marta Sánchez con la ropa y a preparar algunas cosas, antes de salir la cantante al escenario. Vamos, que ha nacido otra estrella.
La joven, que fue invitada recientemente al programa Mis raíces, presentado por Isabel Jiménez, explicó que la admiración por el trabajo 'detrás de cámaras' de su madre se remonta a muchos años atrás. "Recuerdo siempre verla maquillándose en el baño y me quedaba embobada. Soy como su asistente personal, pero sí. Nos lo pasamos muy bien juntas. Nos reímos mucho juntas", confesaba.
Además, admitía que hasta hace poco no conocía el calibre de la fama de su madre, a quien está muy unida. "Hace dos años que supe realmente quién es. Para mí es mi madre, mami. No la veo como cantante, ni famosa, para mí es mamá. Además, es una madre totalmente normal en casa", explicaba.
Esta confesión tiene sentido, puesto que, a pesar de haber vivido rodeada de cámaras, la joven siempre ha mantenido una vida muy discreta. "Siempre he tenido mucho cuidado con esas cosas. Básicamente, no me gusta el mundo televisivo porque lo he vivido muy de cerca con mi madre", explicaba en el mencionado programa.