El próximo 4 de octubre, Cayetano Martínez de Irujo y su prometida, Bárbara Mirjan, se casarán tras una década juntos. Un paso más en su relación que, desde que ¡HOLA! anunció los detalles en exclusiva, se ha convertido en fuente de titulares especulando, entre otros aspectos, sobre quién será la afortunada en llevar del brazo al duque de Arjona al altar.
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Personas del entorno de los novios, han aclarado este punto tan candente a ¡HOLA! tras semanas de rumores. “Aún no está decidido”, confirman en conversación con este medio atajando cualquier tipo de comentario. Un papel que hasta la fecha había ido saltando de su hermana Eugenia Martínez de Irujo a su hija Amina. Un fleco todavía sin cerrar. Aún quedan varios meses por delante y con lo principal ya decidido (la iglesia, la finca y hasta el vestido de novia que firmará Navascués), todavía hay tiempo para continuar resolviendo otros asuntos.
Aunque no haya recibido aún este encargo tan significativo, las fuentes consultadas nos aseguran que la duquesa de Montoro “está volcadísima desde el minuto uno en los preparativos y que la boda de por sí le hace mucha ilusión, la elijan o no como madrina”.
Cabe destacar, como ya relatamos en estas páginas, que la reconciliación de Cayetano y Eugenia fue crucial para que el aristócrata y su novia dieran el paso tras tantos años de noviazgo. “Para Cayetano era muy importante que Eugenia estuviera en la boda”, nos aseguraron entonces. De hecho, la finca que la aristócrata posee en Sevilla fue una de las que en un primer momento se barajó para acoger la boda. Recién acondicionada para la celebración de este tipo de eventos (acogió hace unos años la puesta de largo de Tana), en ella, tanto Eugenia como Cayetano guardan grandes recuerdos de niñez con su madre.
Finalmente, la celebrarán en la finca de Cayetano, Las Arroyuelas, ubicada a las afueras de Sevilla, donde tendrá lugar la ceremonia religiosa ni más ni menos que ante el Cristo de los Gitanos, en la iglesia que acoge los restos mortales de Cayetana de Alba.
Feliz y entusiasmada con esta boda, el papel de la hija menor de la duquesa de Alba cobra aún más significado. Un papel, que las fuentes consultadas han definido como "extraordinario". Lejos de disputas con su hermano –como se ha dicho en los últimos días y que niegan categóricamente–, Eugenia está "siempre participativa, con una palabra amable o un buen consejo siempre valorado por los novios".
De hecho, su complicidad con Bárbara Mirjan es cada vez mayor. Desde siempre existe entre ellas una relación de cariño y respeto, pero unidas por este proyecto, incluso se han dejado ver juntas sonrientes y emocionadas como hace unos días en la celebración del Living Day organizado por la revista ¡HOLA! Living.
Aún habrá que esperar para saber si será la madrina, ya que es un aspecto que no han terminado de perfilar. Lo que sí sabemos es que está encantada con la boda de Cayetano y que su relación con ellos es magnífica tanto en público como en privado.