“Hay un vídeo estupendo en el que salgo cantando con José Luis Martínez-Almeida y Diego Simeone. Los tres, ¡como si no hubiera un mañana! Almeida es un tipo que siempre ha sido muy cariñoso con la banda, ya venía a vernos antes de ser alcalde. Por otro lado, soy muy fan de Simeone, es un gran tipo y me hizo ilusión que cantara con nosotros”, confiesa David Ascanio a ¡HOLA! cuando le preguntamos a qué personalidad le ha sorprendido ver en la pista de baile de uno de los conciertos del grupo del que es vocalista, Picoco’s Band. Un divertido conjunto musical que se ha convertido en la banda más cool de Madrid. Tras haberse dedicado a componer canciones para algunos de los cantantes más importantes, Ascanio, artista canario de cuarenta y seis años, ha dado un giro a su carrera. Junto a Pedro Roncero; Óscar Alonso, ‘Sir Python’; Dani Criado, y Tolo Pueyo, nos recibe en el estudio que tiene en su casa del centro de Madrid, donde también posa junto a su mujer, la modelo Laura Sánchez, la fan número uno de esta banda que ha revolucionado a la jet set.

—¿Cómo te iniciaste en el mundo de la música?

—Empecé en Canarias cuando era muy pequeño. Mi tío, Luis Morera, es el cantante y compositor de Taburiente, un grupo emblemático de la isla de La Palma. Gracias a él, me interesé por la música. Con catorce años, empecé a escribir mis propias canciones y monté un grupo en Canarias. A los veintiuno, vine a Madrid. Miguel Bosé vio una maqueta mía y me llamó para trabajar con él. A partir de ahí, escribí canciones para él, pero también para Ana Torroja, he trabajado para series de televisión... He sido muchos años compositor, hasta que Picoco’s Band apareció y comencé a cantar versiones de canciones de éxito, algo que en mi vida me hubie­ra imaginado.

—¿Cuál ha sido el tema más cono­cido que has compuesto?

—Creo que Olvídame tú, el tema más fuerte que sacó Miguel de un disco que se llamaba Por vos muero. Aunque en Papito está mi tema favorito, Carla, donde Miguel y yo cantamos a dúo.

—¿Qué relación tienes con Miguel Bosé y qué opinas de sus últimas declaraciones?

—Lo quiero y siempre le estaré agradecido por todo lo que ha hecho por mí. Hablamos de vez en cuando por teléfono, pero no nos vemos tanto desde que se fue a vivir a México. En cuanto a sus declaraciones, yo no opino lo mismo porque soy muy hipocondríaco y lo que me pille, que sea vacunado.

“Laura es fan de la música en sí, escucha de todo y dice que venir a oírnos cantar es un planazo. Lo que más le gusta es que no para de bailar y, por supuesto... ¡el cantante!”, cuenta entre risas

—Ahora estás arrasando con Picoco’s Band. ¿Cómo surgió la idea de montar este grupo?

—La Picoco’s es pura casualidad. Nació con Pedro, el pianista de Olé Olé, al que conocí porque era el novio de una amiga. Él tocaba en un bar y, alguna vez, yo cantaba con él. De repente, el bar se empezó a animar y fue cuando me llamó Pepe, el dueño de La Taberna de los Gallos, para proponerme que cantáramos ahí. Un día, vino Tolo, guitarrista de Miguel Bosé. Otro día nos escuchó junto a Python, que tocaba para Nena Daconte, y Dani, que tocaba con Móni­ca Naranjo, y nos dijo que nos quería a los cinco. Ya en Los Gallos fue una revolución. Se llenaba, colas en la calle para escucharnos, venía gente de toda España... Teníamos un montón de contratos de festivales y fiestas, pero todo se rompió con la pandemia. Tuvimos que empezar de cero. Fue cuando nos llamaron de Aurora, una sala convertida en restaurante espectáculo, y ahí estamos los jueves y los viernes desde hace un año.

—Aparte del alcalde de Madrid y el entrenador del Atlético, ¿para qué otras personalidades habéis tocado?

—Hemos tenido de todo... Por ejemplo, estuvimos en el cumpleaños de Mario Vargas Llosa. Fue muy divertido y con gente de todo tipo. Nos había contratado el chef Mario Sandoval, que sirvió el menú en su finca de El Escorial. Nos encargamos del fin de fiesta. No son conciertos fáciles, tienes que ganarte a la gente y meterlos en el show poco a poco, pero me sorprendió el buen rollo de todo el mundo. A Mario e Isabel los vi poco, pero Tamara y su chico, Íñigo, estuvieron especialmente cariñosos con nosotros. ¡Lo cantaron y lo bailaron todo! Tocamos en muchos formatos, desde una fiesta privada hasta conciertos en plazas de toros. No somos una orquesta, somos una banda muy cool con un público muy guay que va desde los treinta a los sesenta años.

“Laura me inspira. Le he escrito muchas canciones, pero dice que no son para ella. A lo mejor tengo que cantarle su DNI”, declara David con humor

—¿Tu mujer es fan de los Picoco’s?

—Laura es fan de la música en sí, escucha de todo y dice que venir a oírnos cantar es un planazo. Así que creo que un poco fan de los Picoco’s sí es... Lo que más le gusta es que no para de bailar y, por supuesto... ¡el cantante! (risas).

—Todos los artistas tienen sus musas. Para ti, ¿es Laura una de ellas?

—Laura me inspira muchas cosas. No voy a decir que cuando escribo canciones no pienso en ella. El tema es que le he escrito muchas canciones, pero dice que no son para ella. A lo mejor tengo que cantarle su DNI y su fecha de nacimiento en un estri­billo para que sepa que esa es su canción… (Risas).

—¿Qué proyectos tenéis entre manos?

—Queremos grabar un disco con nuestras canciones más personales, tenemos muchos conciertos cerrados y estamos activando las redes sociales.