Mar Flores vivía con ilusión, el pasado fin de semana, un momento muy importante para sus dos hijos pequeños, que, curiosamente, ha sido por partida doble. Y es que a sus mellizos, Bruno y Darío, aunque van al mismo colegio, les tocó hacer la Primera Comunión en días diferentes.
El primero en recibir el sacramento fue Darío, quien, emocionado, era fotografiado a las puertas del colegio junto a sus padres, Javier Merino y Mar Flores, y sus cuatro hermanos: Carlo Constanzia, de veintinueve años —que se encuentra volcado en el rodaje de la segunda temporada de la serie Toy Boy —; Mauro, de diecisiete años; Beltrán, de quince, y su mellizo, Bruno, de diez años, que estuvo muy atento a todos los detalles de la ceremonia, ya que a él le tocaba al día siguiente. Para la ocasión, la empresaria y modelo apostó por un vestido azul de Tot-Hom, hecho a medida con jacquard de flores bordadas, zapatos de tacón de Aquazzura del mismo tono, con tiras anudadas al tobillo, y el pelo recogido en una coleta. Tras la ceremonia llegó la hora de la celebración, que tuvo lugar en su casa, donde decoraron el jardín con decenas de globos azules y guirnaldas.
No faltó el mayor de sus hijos, Carlo Constanzia, que triunfa como actor en la serie Toy Boy
Un día después, le tocaba el turno a Bruno y la familia volvía a reunirse de nuevo. En esta segunda celebración, Mar daba otra lección de estilo con un look muy distinto al del día anterior: llevó un mono, también de Tot-Hom, también de costura, con transparencias en el escote y las mangas, que combinó con sandalias de tacón.
Un fin de semana inolvidable para Mar en el que, una vez más, ha demostrado la buena relación que tiene con su exmarido, a pesar de haber puesto fin a su matrimonio en 2016.
