Han pasado las semanas y ya es la hora. Toca recuperar la forma física, especialmente en nuestras piernas, para volver a correr. El confinamiento durante la crisis sanitaria mundial de la COVID 19 ha alejado tanto a corredores expertos como a aficionados de las pistas, los parques... donde solían practicar running. Durante un largo período no pudieron ejercitarse, y como si de unas largas vacaciones se tratara, la forma física perdida se notará especialmente en los primeros días de una nueva rutina de actividades físicas. Es normal que durante estos meses el estilo de vida haya pasado a ser algo más sedentario, por lo que seguir unas pautas a la hora de volver a enfundarse las zapatillas de correr permitirá que la transición sea más suave y cómoda, para que en un breve tiempo todo vuelva a la normalidad.
Va a ser difícil tanto a nivel mental como físicamente, ya que el cuerpo se habrá adaptado a una nueva situación. Paciencia, esfuerzo e ir paso a paso serán las claves que nos permitan llegar al objetivo alcanzado previamente en pocas semanas. Lo peor de volver a los entrenamientos sería forzar el inicio y provocar una lesión que nos deje más tiempo sin actividad física. Así que el descanso, la hidratación y la alimentación juegan un esencial papel en el deporte, pero son aún más importantes si se retoma el ejercicio tras un parón de varias semanas.