Playas de La Graciosa, la isla más desconocida de las Canarias
Desde el Mirador del Río, que César Manrique levantó en el Risco de Famara de Lanzarote, se contempla la mejor panorámica del vecino archipiélago Chinijo y de su única isla habitada. Casas blancas y bicicletas, volcanes rojizos y playas de arena dorada y aguas turquesa definen sus 29 kilómetros cuadrados. Los pocos visitantes que llegan hasta ella se sienten en el paraíso.