La corona es de diseño moderno y un tanto futurista, aunque fuera inspirada en un diseño tradicional. Creada por el arquitecto y orfebre Louis Osman, tiene un solo arco central, a diferencia de las coronas de los monarcas británicos que tienen dos o cuatro, para señalar la jerarquía del príncipe inferior a la del soberano, en la parte superior hay una bola del mundo del tamaño de una pelota de ping-pong y en órbita trece diamantes forman la constelación de Escorpio, el signo zodiacal del Príncipe de Gales. Además, tiene diamantes y esmeraldas engastados horizontalmente que representan los Siete Dones de Dios (sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios.) por un lado y los Siete pecados capitales (soberbia, la avaricia, la lujuria, la ira, la gula, la envidia y la pereza) por el otro