Días después de la muerte de la duquesa de Kent, Katharine Lucy Mary Worsley, a los 92 años, se ha revelado el dulce gesto que cada semana tenía su marido, el duque de Kent, con ella. Uno de los primos favoritos de la recordada Isabel II llevaba a su difunta esposa a la peluquería todas las semanas, una enternecedora costumbre en un matrimonio que duró 64 años.
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Gracias a Hugo Vickers, coautor de las memorias del Duque, se ha sabido de este entrañable detalle del aristócrata a la mujer de su vida. “La Duquesa estaba muy presente en Wren House, la residencia del Duque en los terrenos del Palacio de Kensington. La llevaba una vez por semana a la peluquería”.
Los Duques estuvieron casados más de seis décadas después de que la Duquesa conociera el nieto del rey Jorge V, el príncipe Eduardo, en 1957 en una fiesta cuando él servía en los Royal Scots Greys en Catterick. Durante los años siguientes circularon rumores de romance, pero también hubo indicios de oposición por la relación del primo hermano de la Reina y la hija de un escudero. La pareja logró casarse a pesar de todo y tuvo tres hijos: George Windsor, conde de St. Andrews, Lady Helen Taylor y Lord Nicholas Windsor.
La triste noticia del fallecimiento de la esposa de Eduardo de Kent fue anunciada de la siguiente manera: “Con profundo pesar, el Palacio de Buckingham anuncia el fallecimiento de Su Alteza Real la duquesa de Kent. Su alteza real falleció pacíficamente anoche en el Palacio de Kensington, rodeada de su familia. El Rey, la Reina y todos los miembros de la Familia Real se unen al duque de Kent, a sus hijos y a sus nietos en el duelo por su pérdida y recuerdan con cariño la devoción de toda la vida de la Duquesa a todas las organizaciones con las que estuvo vinculada, su pasión por la música y su empatía por los jóvenes”.
La duquesa de Kent pasó gran parte de su vida como un miembro destacado y muy querido de la Familia Real británica. Se retiró oficialmente de sus deberes reales en 2002. En ese momento, le comunicó a la difunta reina Isabel II que ya no deseaba usar su título de Su Alteza Real. Tras retirarse de sus deberes, no se jubiló del todo, sino que trabajó como profesora de música en la Escuela Primaria Wansbeck de Hull, donde era conocida como Sra. Kent. En declaraciones a The Telegraph en 2022, declaró: "Solo el director sabía quién era yo. Los padres no lo sabían ni los alumnos. Nadie se dio cuenta. No hubo publicidad alguna al respecto; simplemente parecía funcionar".