El príncipe Harry y Meghan Markle han dejado claro que, pese a las críticas y la presión mediática, su prioridad sigue siendo la familia. Esta semana, los duques de Sussex protagonizaron una entrañable escapada a Disneyland California junto a sus hijos, Archie y Lilibet, con motivo del cuarto cumpleaños de la pequeña. Un viaje en el que han vuelto a mostrarse cómplices, cercanos y volcados en sus hijos. ¡No te pierdas las imágenes de su entrañable escapada en familia!
La familia al completo disfrutó de dos jornadas llenas de magia y diversión en el parque temático más famoso del mundo. A través de un emotivo video publicado por Meghan, se puede ver cómo los Sussex se sumergieron de lleno en el universo Disney, compartiendo momentos de complicidad y ternura. En las imágenes, ambos aparecen con orejas de Mickey a juego, acompañando a sus hijos por sus atracciones preferidas. “¡Gracias por regalarnos dos días de pura alegría en familia!”, escribía Meghan en la publicación. La frase resume el espíritu de este viaje en el que se los vio sonrientes, relajados y completamente volcados en hacer felices a sus pequeños.
Un cumpleaños muy especial para Lilibet
Todo indica que la visita al parque coincidió con el cumpleaños número cuatro de Lilibet, una fecha muy especial para la familia. Como parte de la celebración, la pequeña disfrutó de una increíble torta inspirada en La Sirenita, decorada con perlas comestibles, figuras de coral, Sebastián el cangrejo y una imponente figura de Ariel en la cima. En la base podía leerse, en letras rosas: “Feliz cumpleaños, Lili”.
Además, Archie y Lili conocieron a algunos de sus personajes favoritos, como la Reina Elsa de Frozen, mientras que sus padres no dudaron en acompañarlos en cada experiencia, desde los paseos en montaña rusa hasta las compras de peluches de Mickey y Minnie.
Entre celebraciones y polémicas
Meghan y Harry decidieron compartir en sus redes sociales algunos recuerdos íntimos con Lilibet. Entre ellos, una foto actual madre e hija en un barco, junto a una imagen en blanco y negro del día en que nació. “Hace cuatro años, ella llegó a nuestras vidas —y cada día desde entonces ha sido más brillante y mejor gracias a eso”, escribió Meghan emocionada. En otra publicación, compartió una imagen de Harry sosteniendo a Lilibet recién nacida, con la frase: “El vínculo más tierno que he visto crecer . La niña de papá y su pequeña aventurera favorita”.
La visita a Disneyland se produjo apenas dos días después de que Meghan publicara un video inédito del momento previo al nacimiento de Lilibet, donde aparece bailando en la sala de partos. En las imágenes se la ve sonriente con un camisón negro, mientras Harry cruza frente a la cámara en sudadera verde y jeans. “Ambos niños nacieron con una semana de retraso… así que cuando la comida picante, las largas caminatas y la acupuntura no funcionaron… ¡solo quedaba una cosa por intentar! ”, escribió Meghan junto a la publicación. Sin embargo, desató una ola de reacciones y críticas en redes.
Una vida distinta, pero más auténtica
Desde que dejaron atrás sus deberes reales en Reino Unido, los duques de Sussex se han instalado en Montecito, California, donde crían a sus hijos lejos del protocolo, con una vida más conectada con la naturaleza y los valores familiares. A través de pequeños gestos y publicaciones, como esta escapada a Disneyland, buscan compartir con el mundo retazos de su cotidianidad, mostrando a sus hijos crecer en libertad, rodeados de amor y experiencias inolvidables. Aunque su rostro no se muestre al público, Lilibet parece haber heredado el cabello pelirrojo de su padre y una curiosidad que se refleja en cada foto. Archie, el mayor, también disfrutó a pleno la experiencia, mostrando la complicidad de dos hermanos que, pese a su corta edad, ya forman un vínculo especial.
Sin duda, este viaje no solo fue un regalo para Lilibet, sino una reafirmación pública de lo que los une como familia. En medio del ruido mediático, Harry y Meghan siguen apostando por los momentos simples, sinceros y compartidos. Y en esta ocasión, Disney fue el escenario perfecto para demostrarlo.