El final del verano de 2025 trajo una boda real de cuento de hadas como no se recuerda. La princesa María Carolina, la segunda de los cuatro hijos que tienen los príncipes herederos Alois y Sophie, y, por tanto, nieta del monarca, el príncipe Hans-Adam II, se casó con Leopoldo Maduro Vollmer, un banquero de inversión venezolano, descendiente de una de las familias más adineradas del país sudamericano. Fue un enlace al que no faltó nadie de los círculos aristocráticos europeos, como Victoria de Hohenlohe, duquesa de Medinaceli, con su marido Maxime Corneille; los duques de Noto, Jaime de Borbón-Dos Sicilias y su esposa, Charlotte Lindesay- Berthune; la princesa Margarita, hermana de Enrique de Luxeumburgo, entre otros rostros conocidos. Tampoco se perdió el gran día la princesa Tatiana de Liechtenstein, quien fue muy conocida hace décadas en España por haber sido candidata a novia del entonces príncipe Felipe.
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Tatiana, tía de la princesa María Carolina, acaparó sin querer todos los focos en la ceremonia. Nacida el 10 de abril de 1973, es la única hija y menor de los cuatro hijos del actual soberano de Liechtenstein. Además de alteza serenísima, Tatiana es condesa de Rietberg. Desde muy joven estuvo vinculada a nuestro país por su tía, la princesa Nora, casada con Vicente Sartorius y Cabeza de Vaca, marqués de Mariño. Estudió Dirección de empresas en los años noventa y parecía la mujer ideal para ocupar el corazón de don Felipe por su linaje y su cercanía con España.
En aquella época, Tatiana ocupó titulares y portadas, como la de ¡HOLA! como la chica perfecta para ocupar el corazón del entonces príncipe Felipe. En abril de 1995, la revista publicó un reportaje en el que tras la ruptura del príncipe Felipe con Isabel Sartorius, al ahora Rey no se le había vuelto a conocer ninguna otra relación. “Sin embargo, desde hace unas semanas, y de modo insistente —rezaba la crónica de ¡HOLA!—, en círculos cercanos a la Familia Real, e incluso entre periodistas que normalmente no especulan sin buenas razones, ha vuelto a hablarse de la princesa Tatiana de Liechtenstein como de la probable próxima esposa del Príncipe de Asturias”.
En ese momento, don Felipe tenía 27 años, y Tatiana, estaba a punto de celebrar su 22 cumpleaños, se conocían desde hacía mucho tiempo y habían coincidido en varios eventos como bodas reales y reuniones de miembros jóvenes de la realeza europea. El último gran acontecimiento en que se encontraron ese año fue en la boda de la infanta Elena con Jaime de Marichalar.
"Un joven muy educado, inteligente y simpático"
La única declaración de Tatiana de Liechtenstein sobre don Felipe se produjo después de una fiesta, celebrada a finales de los años ochenta en la residencia de la Princesa, el castillo de Vaduz, a la que asistieron varios príncipes europeos, entre ellos el de Asturias. Al hilo de las especulaciones sobre la amistad entre ambos, un periodista preguntó a Tatiana sobre la presencia del heredero español en Liechtenstein. “Fue un gran honor contar con la presencia del príncipe Felipe en nuestro castillo”. El periodista le pidió su opinión sobre el hijo de don Juan Carlos, a lo que la princesa respondió: “Me parece un joven muy educado, inteligente y simpático”.
La princesa Tatiana nunca fue nada más que una amiga para el Rey de España y en 1999 se casó con el barón Philipp von Lattorf, a quien conoció en Londres. Juntos han formado una familia más que numerosa, con siete hijos: Lucas, de 25 años; Isabel, de 23; María Teresa, de 21; Camila, de 21,; Ana Pía, de 17; Sofía, de 15 años, y el pequeño Maximiliano, de 13. La Princesa vive con su familia en Austria y mantiene una vida de lo más discreta, aunque no se pierde los grandes acontecimientos de la Familia Principesca como es el Día Nacional de Liechtestein o bodas reales.
