Federico y Mary de Dinamarca han abierto las puertas de Amalienborg este miércoles por la tarde para ser los anfitriones de jefes de Estado y líderes de Gobierno de Europa. Los Reyes ejercieron de perfectos anfitriones y así, recibieron, entre otros, al príncipe Alberto de Mónaco, al presidente de Francia, Emmanuel Macron, o a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. El monarca danés quiso hacer un brindis y dirigió las siguientes palabras a los presentes: "Levento mi copa por Europa y los pueblos de Europa, con el deseo de felicidad y armonía, progreso y prosperidad para todos nosotros". Los asistentes a esta velada comieron un menú compuesto por bacalao de Gorenlandia, algas de Kattegat, emulsión de langosta y piel de pollo, malvaviscos de la costa oeste danesa y rebozuelos, croqueta de pierma de cordero estofada sobre queso crujiente de hierbas con puré de calabaza y base de nueces y chocolate con ganache de yogur, compota de manzana y espino amarillo y caramelo.
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