En un principio parecía que la mayoría de edad del príncipe Hisahito iba a ser un gran acontecimiento para la familia real japonesa y también para el país, ya que no se vivía algo así desde hacía más de cuarenta años. Sin embargo, la frugalidad está instalada en la Casa Imperial y los grandes fastos se miden a cuenta gotas. Si cuando su prima, la princesa Aiko, única hija de los actuales emperadores, cumplió 20 años, se tomó la decisión de no hacer para ella una nueva tiara, ahora el paso a la vida adulta del futuro emperador, también se rige por la austeridad. Serán cinco días de conmemoraciones, pero limitadas a los ritos solemnes, reciclando toda la simbología real y con un único almuerzo que se prevé a puerta cerrada y en un lugar sencillo de Tokio.
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Para empezar las celebraciones por la mayoría de edad del príncipe Hisahito, el único que puede reinar en el futuro debido a la exclusión de mujeres que hace la ley que rige la sucesión en la Familia Imperial, llegan con un año de retraso, ya que el sobrino del emperador cumplió los 18 años en septiembre de 2024, pero entonces se decidió que no convenía distraerlo de sus estudios, ya que estaba preparando su ingreso en la Facultad de Ciencias de la Vida y del Medio Ambiente de la Universidad de Tsukuba, donde estudia biología.
Ahora, coincidiendo con su 19 cumpleaños, la Agencia de la Casa Imperial advierte que el segundo en la línea de sucesión al trono está listo para las ceremonias y eventos asociados con su mayoría de edad y que tendrán lugar del 6 al 10 de septiembre de este año. Nada que ver con las grandes fiestas de Ingrid de Noruega o de Christian de Dinamarca, allí las tradiciones son otras y desde luego no incluyen invitaciones a miembros de otras casas reales, aunque recientemente Hisahito ya debutó en esto ejerciendo de anfitrión para otro rey del futuro, Huseín de Jordania.
Serán sus padres, el actual príncipe heredero Akishino y la princesa Kiko, los que le ofrezcan una ceremonia que comenzará el 6 de septiembre a las 8:45 de la mañana, cuando un mensajero le entregue una corona tradicional que enviará su tío Naruhito, el actual emperador. Será entonces cuando Hisahito asista su Kakan-no-Gi en el Palacio Imperial, que es ritual sobre el uso de la corona, para el que irá vestido con las ropas tradicionales previstas para los hombres de su rango de la familia imperial. Llegados a este punto, ya se advierte que Hisahito reciclará, como medida de austeridad y simbolismo, absolutamente todo, recuperando los símbolos reales que utilizó su padre en su mayoría de edad.
Eso es exactamente lo mismo que se hizo hace cuatro años, cuando fue su prima, la princesa Aiko, la que cumplió la mayoría de edad, que entonces estaba fijada en el país a los 20 años. A diferencia de lo que había ocurrido en años anteriores con Mako y Kako, las hermanas mayores de Hisahito para las que sí se encargaron conjuntos de tiara y collar a juego, la hija de los emperadores recuperó la tiara que se había hecho para su tía, la princesa Sayako, que tuvo que renunciar a sus joyas, a su título real y a su posición institucional para casarse en el año 2005.
Las celebraciones continuarán ya con el príncipe Hisahito "vestido de adulto" y será trasladado en carruaje a los tres santuarios principales para unas plegarias que se enmarcan dentro de las tradiciones sintoístas. No faltará una visita de cortesía, primero a los emperadores, Naruhito -que le ha concedido una distinción de la Orden Suprema del Crisantemo- y Masako, y después a sus abuelos, los anteriores emperadores, Akihito y Michiko. También visitará en días posteriores el mausoleo del primer emperador y será ya el día 10, el último día, cuando asista a un evento público de celebración que será un almuerzo en un establecimiento privado en Tokio al que se espera que asistan solo familiares y autoridades.