En clase©GettyImages

Acoso escolar

Las alarmantes cifras del acoso escolar en España, con víctimas incluso en Primaria

Dos alumnos por clase sufren bullying y uno de cada tres asegura no comentárselo a nadie, según una investigación de la Unidad de Psicología Preventiva de la Universidad Complutense de Madrid

El acoso escolar sigue muy presente en los centros escolares españoles. Y las víctimas (y, por ende, los acosadores) empiezan a sufrirlo a edades demasiado tempranas, en concreto, en torno a los 10 años hay datos registrados. De hecho, la investigación social llevada a cabo por la Unidad de Psicología Preventiva de la Universidad Complutense de Madrid, en colaboración con la Fundación ColaCao abarca desde 4º de Educación Primaria -que los niños cursan con 9 y 10 años- a 4º de Educación Secundaria Obligatoria.

Esta investigación, una de las más completas sobre acoso escolar y ciberacoso que ha habido hasta la fecha en España, pone de manifiesto que hay una mayor prevalencia del bullying en Primaria que en Secundaria; así, en el primer ciclo de la educación obligatoria, el 7,6% de los alumnos se consideran víctimas de acoso escolar, porcentaje que se reduce al 5,3% en el segundo ciclo. Cifras ambas igualmente alarmantes que se traducen en que dos alumnos por clase habrían sufrido buylling en los últimos dos meses.

Entre los encuestados (20.662 estudiantes de las 17 comunidades autónomas, de un total de 325 centros educativos), el 2,1% se reconocen como acosadores, lo que refleja que hay un acosador por cada dos clases. De acuerdo con estas cifras significa que hay en nuestro país casi 220.000 estudiantes víctimas de acoso escolar, y más de 74.000 acosadores. También existen un 16,3% de alumnos que se identifican como testigos, es decir, 5 niños por aula.

Las consecuencias de todo esto las sufren las víctimas del acoso durante toda su vida, pues es una de las principales barreras psicológicas, emocionales, sociales y educativas en el desarrollo de la personalidad infantil, pero también las sufren los acosadores: el 20,4% de las víctimas y el 16,8% de los acosadores declaran haber intentado quitarse la vida alguna vez, según se desprende de la investigación. En el caso del ciberacoso, este dato es del 21,1% de las víctimas y del 24,9% de los acosadores.

“Estos hallazgos subrayan la urgente necesidad de intervenir desde las escuelas en la prevención del suicidio, poniendo especial énfasis en ayudar a las víctimas de violencia y abordar las dificultades socioemocionales de quienes acosan para garantizar el bienestar de todos los estudiantes”, advierte la Doctora María José Díaz-Aguado, directora de la investigación y de la Unidad de Psicología Preventiva de la Universidad Complutense de Madrid.

Niño sentado en el suelo del colegio triste©GettyImages

¿Cómo y dónde se producen las agresiones a las víctimas de acoso escolar?

Las agresiones más frecuentes son de tipo verbal y relacional: llamar por motes o burlarse, contar mentiras para que los demás le rechacen, hablar mal de su aspecto físico para hacerle sentir mal e ignorar a propósito excluyendo del grupo. El resto de las agresiones (físicas, sexuales, coacciones, contra las propiedades, racistas o xenófobas, o contra la orientación sexual) son menos frecuentes que las anteriores.

A partir de las respuestas de las víctimas, se desprende que las agresiones sufridas han sido realizadas mayoritariamente en grupo: en el 60,1% de las ocasiones, las víctimas han reconocido su realización grupal. Respecto al tamaño del grupo, el mayor porcentaje (41,8%) responde que eran 2 3 estudiantes. La mayor parte de las agresiones se llevan a cabo por estudiantes del mismo curso que la víctima (68,9%), aunque en un 20,7% de casos lo realizan estudiantes de un curso más alto y en un 9,3% de un curso más bajo.

La investigación también ha analizado los lugares donde se producen estas situaciones de acoso escolar, poniendo de relieve que más de la mitad del bullying se lleva a cabo en el patio (57,8%), con diferencias entre Primaria (69,6%) y Secundaria (48.8%). El aula es el segundo escenario más frecuente (34,3%), sobre todo en secundaria (en ausencia del profesorado, el 34,9% en primaria y el 48,9% en secundaria; y con su presencia el 17,6% y el 35,7%, respectivamente). Después, podemos encontrar otras ubicaciones específicas como son el gimnasio o la clase de educación física, el comedor y las actividades extraescolares, los aseos y el autobús.

¿Qué se está haciendo en los centros educativos para evitar el acoso escolar?

Según los datos recavados por la investigación, casi el 80% de los estudiantes recuerda haber trabajado en su centro educativo la prevención del acoso y qué hacer para detenerlo. Entre los que no recuerdan dicho trabajo, el 7,9% se reconoce víctima y el 2,8% como acosador. Estas cifras se reducen considerablemente en aquellos colegios en los que sí se ha abordado este tema; así, entre quienes recuerdan haber trabajado en el centro contra el acoso, el 5,6% se reconoce como víctima y el 1,7%, como acosador.

“La investigación ha reflejado que el haber trabajado en la escuela contra el acoso escolar reduce significativamente tanto el riesgo de ser víctima de acoso escolar como el riesgo de ser acosador”, asegura Javier Coromina, Patrono de la Fundación ColaCao, entidad impulsora de la investigación.

-Medidas concretas contra el acoso escolar en los centros educativos:

  • Estrategias de afrontamiento emocional. Reduce el riesgo de problemas socioemocionales (como los síntomas depresivos o los problemas de conducta) y de ejercer acoso escolar. Entre los encuestados para la investigación de la Universidad Complutense, respondieron recordar dicho trabajo de afrontamiento emocional el 41,3% del alumnado no involucrado; el 45,7% de las víctimas, y el 34,4%% de los acosadores.
  • Que los afectados sepan a quién pedir ayuda. Que el centro escolar deje claro a sus alumnos a quién acudir en determinadas situaciones es esencial para frenar el avance de las mismas. Así, según la investigación, un 70,5% del alumnado afirma saber a quién pedir ayuda ante un problema psicológico, cifra que baja al 66,1% entre las víctimas de acoso escolar, y al 52,8% a aquellos que ejercen dicho acoso. “Estos resultados reflejan que en los últimos años se ha incrementado la extensión de dichas medidas en los centros educativos de España y que, con ellas, se reduce el riesgo de los problemas que pretenden prevenir”, indica la Doctora María José Díaz-Aguado. “También ponen de manifiesto la necesidad de incrementar dicha eficacia y de extenderlas a toda la población en las mejores condiciones”.