Muy llamativo fue también el bouquet con el que culminó el estilismo. "Fue un ramo desestructurado en donde se mezcló flor natural con flor seca para darle ese carácter actual, desenfadado y romántico a la vez, como toda la decoración que había en la boda. Las flores que se usaron fueron rosas, proteas, scabiosa, helecho, eucaliptus y palmito, pero las grandes protagonistas fueron sin duda las rosas en diferentes variedades y la protea".