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La cantante ha sido, por nuestra parte, una de las invitadas más esperadas de la MET Gala; una representación española de categoría que también ha contado con Georgina Rodríguez con su look lencero de Vetements. La intérprete de Motomami ha posado en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York de blanco, como una novia etérea ataviada con un vestido de Olivier Rousteing para Balmain con el que se ha convertido en una obra de arte en vivo. El diseño, bajo el tema del evento -Superfine: Tailoring Black Style-, se centra en el inicio de la creación en costura, llegando al maniquí primigenio que Rosalía ha encarnado a la perfección.
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Un vestido 'efecto segunda piel'
Rosalía ha posado en las escalinatas del MET con este diseño de Balmain hecho a medida con el que se ha convertido en una auténtica obra de arte. De cuello perkins, manga corta y falda de tubo con cola trasera, el look se frunce en cadera y muslos, ciñéndose como un guante al torso y dibujando hasta el ombligo. Un look escultórico en clave minimalista que ha convertido a la cantante en una de las propuestas más interesantes de la velada.
El look recuerda por su color, su "efecto segunda piel" y ese sello artístico al que a Bella Hadid "le dibujaron" en el histórico desfile de Coperni con spray inteligente, aunque en esta ocasión destaca un enfoque escultórico más marcado por los volúmenes del vestido.
Rosalía ha posado junto al diseñador Olivier Rousteing, quien haciendo referencia a la temática de la noche, Superfine: Tailoring Black Style (Impecable: la confección del estilo negro), ha llevado como complemento una máquina de coser haciendo referencia al trabajo de sastrería.
'Wet look' y supermelena
El look de belleza de Rosalía se ha centrado en el delineado envolvente de color negro, una técnica que potencia la redondez del rasgo con un aspecto de muñeca, y el peinado de pelo suelto y acabado wet al que ha dado forma con una marcada onda al agua. Como anécdota y al contrario que otras invitadas, ha prescindido por completo de joyas.