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Puede que en verano te cueste más privarte de ciertos caprichos. Picar entre horas, probar diferentes platos, más aperitivos... Pero también es un momento ideal para cuidarnos y llevar un estilo de vida saludable y, por qué no, adelgazar. Así lo piensa Ana Sánchez Morillas, Nutricionista-Dietista y creadora de la plataforma Paso de Dietas, quien asegura que las altas temperaturas hacen que sintamos menos hambre y tengamos un mayor apetito por los alimentos frescos y con gran contenido en agua; algo que los hace perfectos para mantenernos hidratados y combatir el calor. Estos alimentos también son más saludables y, en general, con menor contenido calórico, por lo que sí es posible adelgazar en verano. 

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Tiempo de hacer ejercicio

También nos anima a comenzar a hacer ejercicio si no lo practicamos habitualmente. Si vas a la playa o a la montaña, los paseos y caminatas te mantendrán activo… y por qué no descubrir algún deporte nuevo al que te aficiones y con el que te diviertas, importante para coger el hábito. 

Por todo ello, la nutricionista nos invita a cuidarnos más en vacaciones y a no coger esos kilos que querremos perder con la vuelta al trabajo. Y para ello, nos da estos trucos y consejos que nos ayudarán a mantener nuestro peso ideal. 

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Más vegetales y menos fritos

Es verdad que en verano nos apetece sentarnos en una terraza con una cerveza bien fría y picar unos boquerones, calamares y otros alimentos fritos. Podemos hacerlo de vez en cuando, pero no cada día. Lo que sí tienes que consumir a diario son vegetales. Elige, además, cocciones suaves como al horno, vapor o plancha. 

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Hidrátate bien

Lleva siempre contigo una botella de agua fresca y disfruta de infusiones, limonadas y bebidas sin azúcar, frías y caseras. Si sales a tomar algo, puedes pedir agua con gas con una rodaja de limón, té helado, cerveza sin alcohol, tinto de verano con casera sin azúcar o refresco sin azúcar. 

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Ejercicio 

Para no aumentar de peso, es importante realizar algo de ejercicio y, ésta, es una buena época para practicarlo. Aprovecha el tiempo libre y el clima, eso sí, evitando las horas centrales de calor y altas temperaturas. Según los expertos, para no ganar peso es importante combinar ejercicios de cardio y fuerza. Puedes entrenar en la piscina o en el mar. La resistencia del agua hará que tu ejercicio sea más completo. 

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Platos saludables y con menos calorías 

Aprovecha la época de verano para hacer recetas veraniegas que incluyan platos fríos como: gazpachos, cremas, ensaladas, sopas frías. Este es un hábito saludable que te ayudará a bajar de peso. Además de restar calorías a tus menús, también te hidratan, que, como decíamos, es impresincindible para soportar las altas temperaturas. 

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Apuesta por el picoteo saludable

Toma diariamente grasas saludables, como el aceite de oliva virgen extra, el aguacate, semillas o pescado azul. Además de proporcionarte saciedad y ayudar al control del peso, tu piel se beneficia recuperándose antes de los efectos a la exposición solar. Si tienes hambre entre horas, antes de lanzarte a la bolsa de las patatas fritas, come frutos secos o frutas deshidratadas. También te aportan grasas saludables, además de fibra y te sentirás con menos hambre en las comidas. 

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Las salsas te aportan más calorías 

Evita las salsas y aderezos que suman muchas calorías al plato, y en su lugar, aliña tus platos con un buen aceite de oliva virgen extra. Prescindir de aderezos calóricos es un buen hábito para bajar de peso. Si necesitas darle otro toque a tus platos, prueba con las especias, que además de aromatizarlos, tiene propiedades medicinales. 

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Desconecta... aunque sean unas horas 

Ya sabemos que pedimos mucho si te decimos que 'aparques' el móvil en un cajón. Pero es importante que desconectes, aunque sea solo por un tiempo. Es el momento de relajarte y disfrutar de las vacaciones. Tan importante es cuidar el cuerpo como la mente. En vacaciones hay tiempo para todo, así que descansa y disfruta de las pequeñas cosas, como un paseo, una charla, mirar una puesta de sol, tumbarte en la hierba sin hacer nada o meditar. 

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Helados, sí, pero sin pasarte 

Disfruta de los helados, pero solo de vez en cuando. Tienen un contenido muy alto de azúcar, grasas y aditivos. Elaborarlos en casa con ingredientes naturales como frutas, yogur o chocolate, es muy fácil y los tendrás en cualquier momento. Es recomendable que, cuando salgas a comer fuera, sustituyas los postres y helados por fruta o lácteos. Este pequeño gesto te ayudará a tu objetivo de bajar peso. Si te apetece mucho un helado, puedes hacerlos tú misma con zumos de frutas. 

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Comidas en platos más pequeños 

Evita comer porciones grandes de comida y platos pesados, así conseguirás llevar mejor las altas temperaturas. Los días que vayas a tener una comida copiosa, intenta tener una cena algo más ligera a base de verduras o ensaladas. Cuando salgas a comer fuera, pide como guarnición ensalada o verduras a la parrilla en vez de patatas fritas.

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Dormir es importante para no engordar 

Los estudios han relacionado la falta de sueño con el aumento de peso. Por eso, es importante dormir bien si no quieres engordar. Como nos señala La temperatura es un elemento de confort de nuestro entorno necesario para asegurar un sueño profundo, igual que el ruido y la luz. Los días de más calor tenemos un sueño menos profundo, más dificultad para conciliar y nos despertamos por la noche, lo que nos da una sensación de mal descanso. Para intentar paliar el efecto del calor, podemos tomar algunas medidas como dormir con ventilador, o refrescarnos la nuca con una toalla mojada. Durante el día es adecuado mantener las ventanas de casa cerradas para evitar la entrada del aire más caliente. En cambio, al atardecer, es el mejor momento de airear. Durante la noche podemos dormir con la ventana abierta si no nos molesta el ruido o la luz del exterior. 

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