Los gatos son una de las mascotas más queridas, aunque también son objeto de fobia para muchas personas. Ailurofobia es el nombre del miedo atroz que muchos humanos desarrollan contra los felinos; un miedo irracional y extremo que desencadena episodios de ansiedad y nerviosismo, y que muchas veces puede evidenciarse en taquicardias y falta de aliento. Pero no solo las personas experimentan este tipo de fobias.
A la inversa, también los gatos tienen por naturaleza miedos sin sentido, y de forma generalizada a una serie de objetos y situaciones concretas. No es más que un mecanismo de supervivencia. Cuando un gato se enfrenta a algo desconocido su cerebro manda una señal de alerta. Para evitar que tenga temor, lo mejor es dejar que lo explore, poco a poco. Que las novedades lleguen de manera gradual.
Aspiradora
Los felinos tienen muy desarrollado el sentido del oído por lo que es habitual que teman cosas como los petardos, los cohetes, las tormentas o el simple sonido del aspirador. Si para nosotros es molesto ¡imagina para ellos! Es normal que se escondan y se pongan nerviosos cuando se dan estas situaciones.
Lee también: Por qué tu gato siente curiosidad por las visitas que odian a los gatos