Terapia de pareja

Aurora López, psicóloga, nos habla de las rupturas tras las vacaciones: "Hay parejas que usan el verano como un escape a sus conflictos"


Las separaciones se incrementan en septiembre, un fenómeno que, a veces, se da de manera precipitada y que, otras, responde a una necesidad real: te contamos por qué sucede y cómo evitarlo


chica llorando triste novio© Getty Images
Paula MartínsColaborada de Moda y Estar Bien
7 de septiembre de 2025 - 7:00 CEST

El final del verano suele traer consigo una sensación agridulce. Las vacaciones terminan, la rutina nos espera a la vuelta de la esquina y, para muchas parejas, septiembre se convierte en un mes de decisiones cruciales. Lejos de ser solo un factor logístico, como el estrés por el trabajo o la vuelta a las rutinas, es en esta temporada cuando muchos problemas salen a la luz y las parejas ponen punto y final a sus relaciones.

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La psicóloga, experta en parejas, Aurora López, de Más Vida Psicólogos (@mas_vida_psicologos), afirma que el fin del verano actúa como un "espejo", reflejando temas que estaban ocultos. Según la experta en salud mental, la razón detrás del aumento de rupturas en septiembre va más allá de un simple "choque" de realidades. En el fondo, se trata de dinámicas psicológicas profundas que, con la rutina, vuelven a la superficie. 

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Aurora López distingue dos tipos de situaciones a nivel de pareja que relucen llegados este momento. "Por un lado, están las parejas que utilizan el verano como una forma de escapar de sus conflictos: “Son aquellas con dificultades que usan las vacaciones como un tupido velo para evadir sus problemas y disfrutar del momento”. Esta táctica, aunque útil a corto plazo, hace que los problemas sigan ahí, esperando a ser resueltos. "Para ellas, septiembre se convierte en el mes en el que toca afrontar esos conflictos y, ante la situación de no saber resolver o verse en un callejón sin salida, toman la ruptura como opción”, señala.

Por otro lado, existe un escenario opuesto: parejas que ya evadían su relación en la rutina diaria y que las vacaciones, al forzar la convivencia, solo amplifican sus conflictos. “Pueden ser esas que se evitaban en medio de la rutina y que las vacaciones les obliga a conectar, negociar, y ser un equipo, generando un espacio donde la escalada de conflicto aumenta y la pareja se desconecta aún más”.

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El secreto de las parejas que se fortalecen

Si todas las parejas tienen conflictos, ¿qué distingue a aquellas que se mantienen unidas? Aurora López señala que la clave no está en la ausencia de problemas, sino en la manera de gestionarlos. “Las parejas con éxito no es que no tengan conflictos, es que saben conectarse después de la discusión, saben ser un equipo, incluso en medio del conflicto o de la falta de entendimiento”.

La comunicación es la herramienta fundamental, pero no de cualquier forma. La psicóloga hace hincapié en la importancia de la vulnerabilidad: “Las parejas que logran sostenerse son parejas que saben tocar sus problemas desde la parte vulnerable, es decir, expresarse desde el cómo se sienten, cómo les afecta el problema y qué necesitan. La diferencia es abismal, como ilustra con un ejemplo concreto: No es lo mismo decirle a tu pareja que cuando viene su madre a casa te sientes algo invadida y con la sensación de no ser libre para poder organizaros vosotros, que decirle que no entiendes porque va madre va cuando quiere, que debería hablarlo él con ella”.

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Además de la comunicación,  para que una relación funcione debe haber respeto y cuidado mutuo. “Las parejas que logran sostenerse. Son parejas que cuidan, defienden y respetan profundamente la relación y la conexión que tienen, y por lo tanto tocan con mucha delicadeza los temas de riesgo para la relación”. La gestión emocional individual también juega un papel crucial, pues la capacidad de autorregulación de cada persona influye directamente en la dinámica de la pareja: “Suelen ser personas también que se autorregulan mejor, es decir, que cuánta mejor gestión emocional individual tengan, mayor va a ser la probabilidad de tocar los conflictos de forma correcta”, detalla Aurora López.

Miedo a abordar los problemas

A veces sucede que no no estás en el momento adecuado para tener una relación, que no quieres tanto piensas a la otra persona, o que entre ambos hay discrepancias, malentendidos o intereses no compartidos que no se ponen sobre la mesa. Cuando esto sucede y no se cuenta con las herramientas emocionales suficientes para abordar estas situaciones, la ruptura es casi inevitable. La psicóloga lo dice claro: Las parejas que deciden terminar, muchas veces lo hacen como forma de aliviar ese malestar en pareja que no saben cómo abordar. Se sienten en un conflicto permanente que no llega a nada y entienden la ruptura como lo único que les puede salvar de él”. Son, en esencia, relaciones con cuentas pendientes y una gran desconexión emocional.“Cada pareja es un mundo, pero suelen ser relaciones con muchos capítulos sin resolver, con falta de herramientas de comunicación y muy desconectados a nivel emocional y de expectativas”.

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Señales que indican el rumbo de la relación

Si septiembre es el “mes del espejo”, ¿cómo saber si una pareja superará la crisis? Aurora López destaca la importancia de la “memoria de la relación”, es decir,  que "la pareja siga viendo sentido a todo lo que les une y crea que es suficiente como para intentarlo y trabajar en esos aspectos que parecen interferir en ellos”. En estas relaciones, aún existe una chispa de conexión que puede ser reavivada. “Aún queda algo de conexión, confianza, o admiración. Con las herramientas y la terapia suficiente suelen salir adelante”.

Sin embargo, hay señales de alerta que anticipan un mal pronóstico. A juicio de la experta, "tienen peor pronóstico las parejas en las cuáles una de las partes se ha desvinculado emocionalmente de la relación y aunque llegue a terapia ‘ya no está disponible’' para reconectar con la otra”, advierte la psicóloga. También, la falta de esperanza en el futuro de la relación es un indicador claro de que se aproxima el fin. “Puede pasar que, a pesar de querer continuar con ella, algunas tienen muy mala imagen de su relación, de su pareja, y por tanto, probablemente del futuro”.

Si el verano pone a prueba a muchas parejas, el regreso a la rutina actúa como un veredicto. La clave para sobrevivir a esta etapa no está en evitar el conflicto, sino en enfrentarlo con vulnerabilidad, respeto y las herramientas adecuadas.

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Consejos para salvar tu relación en septiembre

Llegada la temporada de entretiempo, puede ser que comiences a notar que tu relación flojea. No tirar la toalla a la primera de cambio es un indicador más de que, de verdad, quieres apostar por tu pareja. Antes de rendirse, merece la pena pasarse a pensar si esa es la vía adecuada, o si, en cambio, todavía tienes energía a intentarlo una vez más. Si eres del último grupo, la experta recomienda algunos pasos a seguir para que sea más llevadero (y para poder hacerlo lo mejor que puedas):

  • Hablar de emociones, no sólo de logística. Cread un espacio a la semana para hablar de cómo os sentís. "Podéis preguntaros cuestiones como 'cómo os habéis sentido últimamente' o 'qué necesitáis de la pareja o de la relación'".
  • Diferenciar un conflicto de una crisis. "Muchas parejas interpretan las discusiones de septiembre como una señal de ruptura, cuando en realidad son reajustes naturales. Para saber a qué te enfrentas, puedes cambiar la mirada de 'esto no funciona' a 'esto es una fase de adaptación'. El lenguaje es clave. Hay que hablar de  esos 'ajustes' en lugar de 'problemas'. Esto reduce la sensación de amenaza".
  • Generar micro-momentos de conexión. "Volver al trabajo y a las rutinas familiares consume energía y tiempo, lo que provoca distanciamiento. No es necesario un viaje romántico, basta con pequeños rituales diarios que pueden ir desde un café juntos por la mañana, un abrazo largo al llegar a casa, hasta simplemente tomarse 15 minutos sin pantallas para conversar".
  • Terapia. "Nadie nos enseña sobre relaciones, vínculos y parejas, se supone que tenemos que rodar de forma natural y que funcione. Muchas veces tener herramientas, salva relaciones".
Aurora López, psicóloga experta en parejas de Más Vida Psicólogos (@mas_vida_psicologos)

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