El tocador resurge como pieza imprescindible en decoración
La revolución del cuidado personal trae de vuelta este mueble olvidado durante décadas
El cuidado personal sube puntos y con él, la decoración del hogar que incluye un tocador, un mueble que parecía de otros tiempos pero que arrasa y es el cómplice perfecto para aplicarse cosméticos para el cuidado del cutis y/o maquillaje. Por supuesto, esta área es también perfecta para arreglarse o secarse el pelo.
A la integración de esta pieza se suma otra tendencia, la de crear espacios multifunción. ¿Dónde colocar idealmente el tocador? Por lo general en un rincón del dormitorio, del baño o, como vemos en la propuesta en este ambiente de Luxxu, en el vestidor.
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¡Alerta tendencia!
Que los tocadores están de moda lo demuestra que puedes encontrar modelos de cualquier estilo decorativo y no solo de aire vintage. Los hay de estilo muy minimalista, industrial, de tendencia de aire más rústica o raw… Tú decides si quieres decantarte por una pieza más clásica o absolutamente moderna, como ‘Lussan’ (en la imagen), un tocador de La Redoute Interieurs, muy práctico gracias a sus múltiples cajones que permiten mantener un perfecto orden. Además, con solo instalar una silla de despacho ergonómica y retirar el espejo también podrás usarlo como mesa de escritorio si tienes que teletrabajar.
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¿Integrado o el punto focal?
Según tus gustos y preferencias, podrás hacer del rincón de tocador un punto focal, destacando su presencia con un estilo y colorido distinto al mobiliario reinante, o integrarlo (incluso por ejemplo en un mueble corrido).
En la propuesta, el baño en suite ideado por Estudio Daniel Rotmensch es de estilo moderno, mientras que el tocador se significa al presentar una magnífica estética art déco mediante el tocador ‘Blink Vanity’ y el taburete tapizado, ambas piezas de Stellar Works.
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En poco espacio
Otro argumento que hace que los rincones de tocador causen furor es que crearlos no va a requerir mucho espacio ni presupuesto, bastará con equiparlo con una mesa con poco fondo, un espejo y un asiento (silla, butaca, taburete o banqueta). Si el mueble cuenta con cajones, estos te permitirán tenerlo todo organizado y a mano. Pero si no es así, bastará con que incorpores cajas de almacenaje.
Esta mesa con el espejo integrado es un tocador de dimensiones contenidas de Casa Viva que se acompaña de una silla de caña. Si tienes poca zona de paso, mejor recurre a un asiento sin respaldo que podrás guardar bajo el mueble cuando no lo uses.
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¿Dónde ubicar el tocador?
Por lo general, por comodidad el rincón de tocador se sitúa en el baño, el dormitorio o el vestidor, que es donde nos vestimos y arreglamos, aunque si por razones de espacio no se puede encontrar en estas estancias, también puede formar parte de una zona de día (mejor si recibe bastante luz natural). En la propuesta, el rincón gana intimidad gracias al biombo separador. El mueble de tocador tipo consola es ‘Saksild’, de la firma danesa JYSK.
Fíjate también en dos ideas decorativas muy prácticas: los colgadores de pared pueden emplearse a modo de expositores para tus collares u otros aliados beauty, como fulares o diademas; y, por otra parte, el puf tapizado cuenta con almacenaje interior.
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Operación camuflaje
Una solución actual e inspiradora: puedes tener tu tocador escamoteado dentro de un armario. La puerta batiente se convierte en la superficie donde maquillarte o dar el último vistazo a tu peinado antes de salir de casa. Esta solución de YLAB Arquitectos en un mueble a medida es ideal, por ejemplo, en el baño para evitar que se refleje el espejo del tocador con el que tenemos sobre el lavabo. Y al mismo tiempo permite rentabilizar los metros de un piso pequeño.
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Detalles que marcan la diferencia
Cuando el espacio no es un problema, tan solo deberás elegir la mejor ubicación para el tocador, siempre procurando que reciba luz natural. La interiorista Pia Capdevila lo sitúa en la esquina del vestidor, junto a la ventana que tamiza los rayos solares con un estor.
La decoración, de estilo clásico actualizado, cuenta con una pequeña ‘joya’: el precioso espejo en formato tríptico que se apoya sobre la mesa y permite verse bien desde cualquier ángulo.
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Íntimo y personal
Dado que las personas de todos los sexos sienten gusto por cuidarse, los tocadores no son un terreno exclusivamente femenino, como se habían concebido en el pasado. De hecho, no es raro encontrar espacios que incorporan un tocador para cada miembro de la pareja (sean o no del mismo sexo), para pasar momentos solo suyos en ‘su’ rincón de belleza. Ejemplifica muy bien lo que estamos contando este baño creado por el diseñador de interiores Jean Porsche, en el que los dos tocadores se ven separados por la bañera de Sanycces. Este ambiente es un derroche de exquisitez y las dos mesas de tocador se realizan con la piedra sinterizada Neolith ‘Strata Argentum’, un modelo con unas vetas muy elegantes que recuerdan al mármol travertino.
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No descuides la iluminación
El tocador es un clásico a prueba de modas y una pieza muy funcional. Por último, queremos destacar que lo ideal es que el rincón donde lo coloques sea bastante luminoso. Y para la iluminación artificial resulta recomendable tener en cuenta que la luz puntual debe evitar sombras en la cara. En este ambiente de Ikea el espejo de pared integra varias bombillas en los laterales con esa función. ¿No te recuerda al look de los camerinos los actores y actrices? Sin duda, un tocador te hará arreglarte como una auténtica estrella de Hollywood.
Respecto a la temperatura de color de las bombillas que utilices, ten en cuenta que las de aproximadamente 4.000 grados kelvin son ideales para maquillarse, ya que sin resultar ni cálidas ni frías proporcionan una representación precisa del color.
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Otra solución es que el espejo integre iluminación led, suave y discreta, como ocurre con el completo tocador ‘Eden-Rock’, un diseño de Sacha Lakic para la firma francesa Roche Bobois.
En este dormitorio el tocador sigue las líneas sinuosas del resto del mobiliario e incluso de las alfombras, logrando un diseño interior impactante y ‘redondo’.
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