10 formas infalibles de añadir elegancia a tu dormitorio
Para conseguir un espacio cómodo y también glamouroso
Tu dormitorio soñado es, ante todo, un espacio confortable y acogedor. Pero eso no quiere decir que no pueda ser elegante y estar decorado con estilo. Toma nota de estas ideas y añade glamour a raudales. Todas son propuestas asequibles y fáciles de llevar a la práctica.
Una apuesta por el relax
Es el primer requisito que ha de cumplir un dormitorio bien diseñado: debe ser un espacio relajante y sereno, que nos ayude a encontrar esa paz que necesitamos a la hora de descansar y conciliar el sueño. Y eso pasa, como no podía ser de otra manera, por mantener un orden impecable.
Piensa que un dormitorio desordenado nunca puede ser relajante ni tampoco elegante. Haz un buen repaso de tus pertenencias y deshazte de lo que te sobra y no aporta nada más que caos.
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El poder decorativo de las molduras
Se trata de un elemento cuya función es decorar y enriquecer estancias como salones, pasillos y dormitorios. Aunque es un adorno propio de ambientes clásicos, cada vez está más presente en ambientes modernos.
Elige un modelo que te guste para el techo o para las paredes, sencillo o más barroco. Hoy existen molduras de poliuretano y otros materiales que puedes instalar tú mismo de forma fácil y efectiva. Se pegan a la superficie con un adhesivo específico y después se pueden pintar con pintura acrílica.
Un consejo: si quieres un resultado simple y esencial, coloca molduras solamente en el techo o en la pared del cabecero, para darle un toque especial.
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Un dormitorio en negro
El negro y los colores oscuros son un buen recurso para añadir elegancia a un espacio. Lo único que hay que pensar es que son más adecuados para habitaciones luminosas que cuenten con una buena orientación y mucha luz natural.
Puedes pintar solamente la pared del cabecero o lanzarte a la aventura y pintar las cuatro. Verdes, azules o grises oscuros son alternativas geniales al negro que derrochan personalidad.
Un consejo: si las paredes de tu dormitorio son oscuras, elige ropa de cama blanca para crear contrastes.
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Que no falte una alfombra
Imagina que, al poner el pie en el suelo cada mañana, en lugar del frío pavimento te encuentras con una superficie cálida, mullida y confortable. Esto es fácil de lograr si pones una alfombra en tu dormitorio.
Además de confort, ganarás en elegancia. Elige un modelo decorativo en armonía con el estilo del dormitorio: puede ser una alfombra étnica, de diseño geométrico, lisa y discreta o con un estampado atractivo. En cuanto al tamaño, puedes colocar un modelo grande o dos alfombras a ambos lados de la cama.
Un consejo: si eres alérgico a los ácaros del polvo no es recomendable colocar una alfombra en el dormitorio. Por mucho que la aspires será difícil eliminar los ácaros por completo.
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Una cama king size
¿Tu dormitorio es amplio y espacioso? Entonces elige sin dudarlo una cama de gran tamaño para dormir a pierna suelta y sin perder ni una pizca de elegancia. Una cama imponente vestida con sábanas de calidad será el elemento más glamouroso de todo el espacio.
Además, es buena idea que aprendas a hacer la cama como la hacen en los hoteles de cinco estrellas: será el detalle que marque la diferencia.
Una idea: ¿quieres una cama que derroche estilo y romanticismo? Elige un modelo con dosel y añade telas vaporosas y ligeras.
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Los cojines, bien elegidos
Además de seleccionar bien ropa de cama que añada elegancia al conjunto de la cama es buena idea contar con unos cuantos cojines. Hacen el espacio más confortable y te ayudan conseguir una cama suntuosa y especial.
Elige tejidos de alta gama, con texturas agradables. Puedes poner, por ejemplo, tres filas de cojines y almohadones: la primera con las propias almohadas y dos más de cojines de diferentes tamaños, colores y estampados, siempre que convivan en armonía.
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Acierta con la ropa de cama
Además de elegir sábanas de calidad que aumenten el confort a la hora de dormir, también es importante contar con colchas, edredones y mantas adecuadas. Apuesta por elementos de diferentes texturas para añadir interés al conjunto y colócalas por capas en la cama.
Un consejo: los colores neutros y claros resultan muy elegantes, aunque puedes introducir alguna tonalidad que destaque. En cualquier caso, la pauta a seguir consiste en elegir tonos suaves que combinen entre sí.
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La iluminación que decora
La manera en la que planifiques la luz artificial de tu dormitorio será decisiva para conseguir que el espacio resulte más o menos acogedor y también más o menos elegante. Atrás quedaron los tiempos en que se colocaba solamente una luz en el techo y dos para las mesillas.
Hoy existe un amplio repertorio de posibilidades lumínicas capaces de transformar los ambientes. Además de contar con varios puntos de luz, general y puntual, puedes elegir tiras de luces led para molduras, para el suelo, etc. Explora las posibilidades que la retroiluminación te ofrece a la hora de decorar tu dormitorio a través de la luz.
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Arte en las paredes
Elegir los cuadros para decorar las paredes es una forma certera de convertir tu dormitorio en un espacio más elegante y distinguido. Todo depende de la elección que hagas. Puedes optar por poner una obra de tamaño XXL o crear una galería combinando varios cuadros y obras enmarcadas. Elige ilustraciones, grabados o fotografías.
Un consejo: además de los cuadros para las paredes, existen otros elementos decorativos que te ayudan a hacer del dormitorio un lugar más elegante. Las plantas de interior, por ejemplo, ponen un toque verde de lo más interesante.
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