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Las orquídeas son plantas de una belleza espectacular. Sus flores hacen gala de formas peculiares y alegres colores que son una alegría para la vista. Y aunque no son difíciles de cuidar, sí que necesitan algunas atenciones específicas. Descubre cómo cultivar Dendrobium y disfruta de su delicadeza y originalidad.

 

Bella y asequible, la orquídea perfecta

La orquídea Dendrobium es una planta de la familia de las Orchidaceae. Incluye más de 1.200 especies diferentes que crecen en la naturaleza en diversas zonas de Asia, Australia y Nueva Zelanda.

Originariamente se trata de plantas epífitas que viven en los árboles y las rocas, sin necesidad de tener sus raíces enterradas, ya que toman los nutrientes del aire. Sin embargo, también se pueden cultivar en maceta.

Además de tratarse de una planta de bellísimas flores, su cuidado no resulta demasiado complejo, lo que la convierte en una de las orquídeas más populares junto con la Phalaenopsis.

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Diferentes variedades

Dentro del amplísimo grupo de las orquídeas Dendrobium se pueden diferenciar dos grandes variedades que, aunque comparten los cuidados esenciales, pueden presentar algunas particularidades que conviene tener en cuenta.

- De hoja caduca y caña blanda, son ejemplares de tallos múltiples con flores pequeñas. La más relevante y frecuente de este grupo es la Dendrobium nobile. En invierno pierden las hojas hasta la primavera cuando brotan de nuevo.

- De hoja perenne y caña dura. Son plantas más altas y presenta uno o dos tallos con hojas de color verde oscuro y flores grandes de unos 7 cm o incluso más. La Dendrobium phalaenopsis es la más conocida de este grupo.

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El ciclo de las estaciones

Una de las cosas que debes hacer si quieres cuidar adecuadamente tus orquídeas Dendrobium es conocer su ciclo de crecimiento para saber qué cuidados requieren en cada etapa.

Vamos a centrarnos en el cultivo de la Dendrobium nobile, la más frecuente. Esta planta comienza su ciclo de crecimiento en primavera cuando surgen nuevos brotes.

En verano estos nuevos tallos continúan creciendo mientras florecen los brotes del año anterior, que pierden las hojas en otoño (ya que se trata de una variedad de hoja caduca). Los brotes nuevos terminan ahora su crecimiento y entran en un descanso vegetativo que coincide con el invierno. Durante estos meses la planta se prepara para florecer, lo que sucederá con la llegada del buen tiempo.

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¿Dónde la pongo?

Para que tu Dendrobium crezca saludable tendrás que buscarle el lugar adecuado en tu casa. Debe ser un emplazamiento muy luminoso, pero en el que no le alcancen los rayos directos del sol, especialmente desde abril hasta octubre. Solo los tolera, de forma moderada, durante el invierno.

Un consejo: si pones tu Dendrobium en la cocina o en el office ten la precaución de no colocarlo junto a frutas y hortalizas que destilen etileno, ya que esto hará que se caigan los brotes de la planta, que no se abran o que se marchiten antes de tiempo.

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El mejor sustrato

¿Quieres que tus Dendrobium crezcan esplendorosas? Entonces proporciónales un sustrato de calidad, mejor si es específico para orquídeas. Cuando lo pongas en la maceta ten en cuenta que no debe estar demasiado compacto, ya que entonces no presentaría un buen drenaje y las raíces de la planta no se oxigenarían adecuadamente.

Es conveniente renovar el sustrato cada dos años, más o menos. En cuanto a la maceta, a las Dendrobium les gusta llenar todo el espacio con sus raíces, por lo que no debes elegir tiestos demasiado grandes.

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El riego perfecto

Regar las plantas es uno de los cuidados más problemáticos, ya que es difícil calcular la cantidad de agua que necesitan y a veces nos cuesta tener claro si nos hemos pasado o nos estamos quedando cortos.

En el caso de la orquídea Dendrobium debes saber que no necesita mucho riego. Bastará con un aporte generoso de agua a la semana, vigilando que no se seque el sustrato entre riego y riego. Ten en cuenta que a la planta hace más daño un exceso de agua que la sequía ligera. Si ves que las hojas se ponen amarillas, es que la estás regando demasiado.

Un consejo: es una planta exigente con la humedad ambiental. Le gusta tener las hojas hidratadas, por lo que no está de más que la pulverices con frecuencia.

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Cómo estimular la floración

El mayor encanto de las orquídeas, también de las Dendrobium, es su bella y exquisita floración. En este caso, ambos grupos, ya sean de hoja caduca o perenne, hacen gala de preciosas flores de diferentes colores: blanco, rosa, púrpura o anaranjado.

Si quieres estimular la floración conviene que les proporciones mucha luminosidad. También les vendrá bien cierto contraste de temperaturas entre el día y la noche. Puedes dejarlas de día en el interior de casa, y sacarlas de noche a la terraza o al jardín, teniendo cuidado con las heladas ya que no las toleran.

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Nutrientes para que crezcan mejor

¿Quieres que tus Dendrobium se desarrollen fuertes y sanas y tengan preciosas flores? Abónalas siguiendo una pauta correcta y lo conseguirás. Debes proporcionarles el fertilizante adecuado, un abono para orquídeas, cada tres semanas durante los meses de crecimiento (primavera y verano). En otoño e invierno puedes espaciar los aportes cada cinco semanas. Con esta frecuencia de abonado estas plantas estarán más fuertes y florecerán más y mejor.

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Plagas y enfermedades

Los insectos que afectan a este tipo de orquídeas con más frecuencia son el pulgón y la cochinilla. En el caso del pulgón, debes revisar los botones florales, las hojas y los brotes nuevos, provocando en ocasiones manchas negras. En cuanto a la cochinilla, también provoca manchas oscuras, sobre todo en el envés de las hojas. Tan pronto como hayas detectado la presencia de cualquiera de estas plagas deberás tratar tu planta con los insecticidas adecuados.

Otra cosa son las enfermedades que pueden sufrir las Dendrobium. Entre ellas destacan las provocadas por los hongos, como la botritis o la podredumbre negra. Combátelas con un fungicida específico, teniendo la precaución de no aplicarlo sobre las hojas.

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