Riego automático, ¿de verdad lo necesitas?
En este caso la respuesta depende de muchos factores. Un jardín seco apenas necesitará aportes de agua y, un jardín de reducidas dimensiones resultará fácil y rápido de regar. En ese caso la respuesta es negativa.
Entonces, ¿cuándo debes plantearte el riego automático? Si tienes periodos prolongados de ausencia en casa, porque por ejemplo viajas mucho a causa del trabajo. Y, muy especialmente, si tu jardín es de un tamaño mediano o grande y hay plantas exigentes con la frecuencia de riego, como grandes extensiones de césped. En esos casos, nada de escatimar, porque tu tiempo también es oro: instala aspersores o un sistema por goteo.
Ya puestos a invertir, quizá te salga a cuenta apostar por un sistema de riego ‘inteligente’. Sí, has leído bien. ¿Cómo funciona? Tiene sensores automáticos que adatarán la cantidad del riego al clima y las necesidades del momento. Por ejemplo, detendrá el riego si empieza a llover, por lo que no desperdiciarás ni una gota de agua.
Leer más: ¿Sabes cuál es el mejor sistema de riego para tu jardín?