Si trabajas en casa, es importante que cada cierto tiempo hagas una limpieza en profundidad del espacio tanto por higiene y salud como por bienestar, ya que siempre es más agradable trabajar en un lugar ordenado y limpio, que favorezca una atmósfera confortable que te ayude, además, a concentrarte mejor. Estas ideas prácticas te dicen cómo hacerla de forma correcta y sin perder tiempo extra.
Ventila
Este es uno de los hábitos que debes realizar todos los días, especialmente si tu oficina en casa comparte espacio con el dormitorio o el salón. Ventilar permite la renovación del aire interior, pero también ayuda a eliminar gérmenes. Lo ideal es que abras ventanas y puertas (así creas ventilación cruzada) durante 15 minutos, más si es un espacio grande o tienes la (mala) costumbre de fumar mientras tecleas.