¿Necesitas una idea sencilla y asequible para actualizar tu dormitorio? Apuesta por las láminas decorativas. Tienes un interminable abanico de posibilidades para elegir y, además, resultan fáciles de encontrar. Te damos algunas pautas para lograr el mejor efecto: motivos, tamaños, formas de colocarlas… ¡Todo cuenta!
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Tu propia composición
Puede que no se trate de exclusivas obras de arte, pero las láminas son perfectas para decorar tu casa. Precisamente porque eres tú quien las elige y quien decide cómo exponerlas. Por eso, el primer consejo para triunfar a la hora de seleccionarlas es optar por las que realmente te gustan, por las que te transmiten una emoción positiva o un sentimiento de placer visual, de bienestar. A partir de ahí podrás crear la mejor composición: por ejemplo, si no dispones de cabecero para la cama puedes hacerte con un conjunto de varias láminas de diferentes tamaños. Eso sí, procura que compartan un nexo de unión: los tonos, los marcos, los motivos, etc.
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En pareja
Amamos la simetría. En interiorismo, y también en otros ámbitos, nos gusta la dualidad y también los números pares. Por eso es buena idea decorar la pared del dormitorio con dos láminas similares como en la fotografía. Elige una pareja de ilustraciones de una misma serie, ya sean motivos botánicos o de otro estilo, y colócalas una junto a otra. El resultado transmite orden, paz y serenidad, todas ellas sensaciones perfectas para los dormitorios y zonas de descanso.
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Gama de color
Si te decides por colocar varias ilustraciones de diferentes tamaños, una gran idea es elegir aquellas que comparten colores similares. Incluso conviene optar por tonos que combinen con la decoración del dormitorio: el color de la pared, la ropa de cama, las cortinas, algunos muebles auxiliares, etc. El efecto final resulta muy armónico, lo que siempre es un plus en el dormitorio. Una idea para crear la composición: alterna las obras más claras con otras más oscuras para crear dinamismo y equilibrar el conjunto.
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En el mapa
Dentro del universo de las láminas decorativas, en el que podrás encontrar miles y miles de motivos que te gustarán, los mapas tienen un papel protagonista. Y es que derrochan encanto y belleza, y son toda una declaración de intenciones de la que podemos aprovecharnos a la hora de decorar un espacio. Los mapas hablan de aventuras, de viajes, de lugares remotos o cercanos… Además, están disponibles en estilos diferentes, por lo que seguro que encuentras el que mejor le va a tu espacio. Si te decides por los mapas antiguos reforzarás el aire clásico del dormitorio, mientras que si pones un modelo de los años 70 conseguirás un toque vintage muy atractivo. También los hay muy vanguardistas, para espacios contemporáneos. Además de mapas, son tendencia los planos de ciudades.
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Cuestión de contrastes
A la hora de crear composiciones de diferentes ilustraciones, podemos optar por elegir colores similares a los de la decoración para crear armonía, o todo lo contrario. Podemos colocar láminas en blanco y negro sobre una pared oscura para crear contraste. El resultado es igualmente muy atractivo, y todo depende de tus propios gustos. Una idea: coloca en el punto central el cuadro más grande y coloca el resto alrededor, creando un esquema atractivo en función del espacio disponible.
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Protagonista estelar
Si quieres destacar una lámina decorativa en especial, lo mejor es colocarla en solitario para que acapare todas las miradas. Eso sí, debe tener un tamaño considerable, para que no se pierda en una pared demasiado grande. Puedes sustituir el clásico cabecero por una imagen de tamaño XXL, utilizando alguna idea para colocarla. En la fotografía se ha empleado un recurso original: un caballete de madera que sostiene la ilustración enmarcada.
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Mensajes de texto
Una forma muy especial a la hora de elegir las láminas para nuestra habitación es intercalar una o varias con algún mensaje escrito. Pueden ser palabras que nos inspiren o, incluso, una frase completa. Lo importante es que tengan para nosotros un significado especial. Y también es importante elegir una tipografía moderna y estética, según nuestro propio estilo. Mezclar este tipo de recursos con dibujos, geometrías o paisajes es una de las claves que conducen al éxito.
Sin agujeros
Hay muchas formas de colgar obra enmarcada en una pared sin necesidad de hacer agujeros. Puedes utilizar rieles o sistemas adhesivos, pero una idea genial para el dormitorio es apoyar las láminas decorativas cobre un cabecero de obra. Así podrás sustituirlas cuando quieras, hacer diferentes combinaciones o, incluso, cambiarlas de sitio.
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Mix & Match
¿Te apasiona la mezcla en decoración? Si es así, te encantarán las galerías en las que triunfa lo heterogéneo, la combinación de elementos diversos. Y no es de extrañar, porque resultan muy atractivas. Para lograr una gran composición basada en el eclecticismo, mezcla láminas de diferentes tamaños con fotografías artísticas, ilustraciones, dibujos, etc. Para lograr cierto orden visual y que el efecto final no sea un caos has de tener ciertas precauciones. Controla los colores dominantes y cíñete a tres como máximo, y asegúrate de que la colocación de los marcos resulta equilibrada. ¿Cómo? Puedes hacer un croquis con las medidas reales de los cuadros, recortarlos en papel y pegarlos en la pared con cinta de carrocero para ver el efecto. Recuerda dejar una distancia de al menos 5 cm entre los marcos.
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En blanco y negro
Utilizar colores neutros o la combinación de blanco y negro a la hora de elegir las láminas decorativas es una manera muy elegante de vestir las paredes del dormitorio. Se trata de una idea especialmente adecuada para espacios naturales, ya que se adapta perfectamente a diversos estilos como el nórdico o el contemporáneo. Si, como en el dormitorio de la fotografía, quieres colocar cuatro láminas enmarcadas en una línea horizontal, lo mejor es que las cuelgues a la altura de los ojos y que, además, las acerques más a la cama que al techo.