Irlanda se despide entre lágrimas de Dolores O'Riordan

El cielo amaneció gris y la lluvia no dio tregua. La misma tristeza se respiraba en los alrededores de la iglesia de St. Joseph, ubicada en la ciudad donde nació, Limerick, al sur de Irlanda, donde este fin de semana se velaron los restos de Dolores O'Riordan.

Diferentes generaciones de fans formaron largas colas para poder darle su último adiós en la concurrida iglesia, que se encuentra cerca de la escuela secundaria a la que asistió la artista. "La canción se ha terminado, pero los recuerdos permanecen", podía leerse en una de las notas.

El fallecimiento de Dolores O'Riordan ha sacudido con fuerza el mundo de la música pero, sobre todo, ha sido un durísimo golpe que ha dejado destrozados a todos sus seres queridos. Su pareja, Olé Koretsky, componente de la banda D.A.R.K. -de la que ella también era miembro- ha publicado un mensaje conmovedor en el que muestra su gran dolor tras la pérdida de la artista. "Mi amiga, mi compañera, el amor de mi vida se ha ido. Mi corazón está roto y es irreparable. Estoy perdido. La echo mucho de menos. Seguiré vagando por la Tierra, sabiendo que ya no hay un lugar real para mí", concluye.

Visiblemente afectados y sin poder contener las lágrimas, los seguidores más incondicionales de la cantante de The Cranberries, que falleció inesperadamente el pasado 15 de enero a los 46 años, quisieron darle su último adiós con flores y mensajes llenos de cariño.

La música de O'Riordan estuvo presente en todo momento, además de diferentes fotografías de la cantante, durante el servicio, que duró aproximadamente cuatro horas. Además de familiares y amigos, también acudieron el ex ministro de Defensa Willie O'Dea y el ex ministro de Educación Jan O'Sullivan.