En la fotografía aparece el artista separado por 10 años, una del 2007 y otra del 2017. Aunque el título de la instantánea solo es un emoji lacrimoso, el rótulo que acompaña la imagen lo dice casi todo: “Si no eres capaz de soportar al Gucci Mane del 2007, no te mereces al del 2017”. Un lema que deja muy claro que, a pesar de lo desafortunado de las críticas recibidas, Rihanna considera desmerecedores de su talento a aquellos que sólo tienen en cuenta su físico para generar polémica.