El programa Late Xou con Marc Giró contó con la presencia de Antonio Orozco como uno de sus invitados estrella en la noche del martes. El artista catalán está de aniversario por sus 25 años de carrera y acaba de publicar su libro Inevitablemente yo, una confesión íntima sobre salud mental acerca del momento en el que tocó fondo. "La historia que cuento en este libro es la historia más increíble que he vivido: empezar de cero… de verdad. Luchar contra mis inseguridades, contra la falta de emoción, contra la falta de motivación. Y darle la mejor de las oportunidades a mi salud. A mí", reveló.
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Durante la entrevista, Orozco desveló algunos de sus peculiares rituales durante los conciertos, sus problemas con la voz y su pasión por la navegación. Pero hubo un proyecto, el más ambicioso, que le ilusiona por encima del resto, que es convertirse en cantante lírico. Desde hace algo más de tres años, la lírica se ha convertido en uno de sus principales retos y señala que está trabajando muy duro para lograr ser cantante de ópera. "Cuando lo consiga, vendré aquí a debutar como cantante lírico", le prometió a Marc Giró.
Hay un antes y un después en la vida de Antonio Orozco desde que asumió públicamente sus problemas de salud mental, como ansiedad extrema y depresión, que lo llevaron a buscar ayuda profesional. El cantante ha enfrentado múltiples pérdidas devastadoras como la muerte de su padre antes de su éxito musical, su expareja Marina Parrilla en 2011, el productor y amigo Xavi Pérez en 2016, y la madre de su hijo Jan, Susana Prat, que falleció a consecuencia de un cáncer de útero en 2017. Este cúmulo de vicisitudes acumularon un peso emocional que derivó en sobrepeso, insomnio y un colapso que lo obligó a parar su carrera para reconstruirse.
El cantante es padre de dos hijos, Jan, de 19 años, y la pequeña Antonella, de 4. Su hijo mayor ha seguido sus pasos en el mundo de la música y de ellos habló con orgullo durante su paso por Late Xou. En el concierto que ofreció en el Palau Sant Jordi, Antonio Orozco invitó a Jan a subir al escenario y cantar con él. Un momento que resultó muy emotivo para el público y sucedió pocos días después de que Orozco cumpliera 53 años. Padre e hijo se fundieron en un abrazo bajo una marea de luces de móvil, en un momento que muchos asistentes describieron como "mágico" y "difícil de olvidar".
Jan ha estado desde pequeño involucrado en la música y ha seguido una carrera artística, estudiando en una escuela de arte en Inglaterra. Antonio Orozco ha compuesto para su hija Antonella canción titulada Te juro que no hay un segundo que no piense en ti. Por sus hijos estaría dispuesto a todo, incluso a aprender inglés, como ha confesado durante la entrevista sobre una experiencia que le llevó a reflexionar y ponerse las pilas con ese idioma para poder comunicarse.
Jan, su hijo mayor de 19 años que vive en Inglaterra como DJ, productor y estudiante de música en Londres, fue protagonista de uno de los momentos más divertidos en la vida de Orozco. " Un día trajo a unos amigos ingleses a su casa", contó el artista. "Y yo allí, diciendo a la tortilla de patatas, 'tórtel, potatos, omelette…' Me salían palabras en todos los idiomas, menos en inglés... Un desastre", contaba entre risas. A partir de ese momento tomó la decisión de aprender inglés. "Me sentía tan mal por no poder hablar con ellos que les dije: ‘Os prometo que cuando volváis a mi casa, hablaré inglés". Y se la ha tomado tan en serio que ahora asegura que es capaz hasta de hablarles de la Lotería de Navidad.