Llega el Día de Acción de Gracias, una de las celebraciones más emblemáticas de los Estados Unidos. Todas las familias del país se reúnen en una noche en la que normalmente el pavo, el puré de patatas o la salsa de arándanos se convierten en los máximos protagonistas del día. Y la artista Jennifer López no se ha quedado atrás con el festín que han preparado en su hogar para su familia.
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La cantante de If You Had My love o Ain't Your Mama ha mostrado a todos sus seguidores la maravillosa cena que ha servido a toda su familia en esta noche tan especial en su casa en Bel Air, en Beverly Hills. En las fotos que ha compartido, se puede ver el resultado final de la cena y cómo ha preparado la cena junto a Emme, uno de sus mellizos.
Algo que ha atraído todas las miradas de los fans ha sido su particular look para la noche. La cantante llevaba puesto un vestido largo satinado en tono champán y la falda caía de forma suave hasta el suelo. Pero, sin duda, lo que más llama la atención son los tacones altos que llevaba. Estos zapatos, que incluían una pedrería y flores bordadas en tonos verdes, amarillos y rosados, creaban un claro contraste festivo comparándolo con el vestido más sobrio. Además, el delantal que llevaba puesto encima del vestido le daba un toque humorístico a su outfit.
La nominada al Grammy aprovechaba la situación para felicitar un buen día a sus más de 380 millones de seguidores en las redes sociales: "Estas son algunas de mis cosas favoritas... ¡Feliz Día de Acción de Gracias a todos! ¡Espero que hayan tenido un hermoso día!". El banquete era muy amplio; un pavo asado entero y rodeado con manzanas, ensaladas, arroz con frutos secos o una cesta llena de frutas.
Pero en una noche tan especial lo que no podían faltar eran los dulces. Tres tartas grandes de calabaza (pumpkin pies), dos tartas de manzana con rejilla y un par de bizcochos. También se ven cinco botellas decoradas con copos de nieve, cintas navideñas y banderitas. Indudablemente, sus dos hijos adolescentes se fueron con un buen sabor de boca a la cama.
En este día tan importante, Lopez ha aprovechado para enseñar su gran árbol de Navidad, que está decorado al milímetro. Todo ello en su mansión en Bel Air, en el barrio de Beverly Hills. Esta propiedad, que solía compartir con su exmarido Ben Affleck, tiene un valor estimado en 52 millones de dólares.
Jennifer Lopez y Ben Affleck estuvieron juntos entre 2001 y 2004, y volvieron a darse una oportunidad que terminó en la boda celebrada en 2022. Pero la pareja de Hollywood tenían diferencias irreconciliables y dos años más tarde, en 2024, empezaron el proceso para divorciarse. Pero ellos seguían compartiendo su enorme mansión en Beverly Hills. El 21 de febrero finalizaban el proceso de su divorcio. La pareja ha intentado vender su gran propiedad, pero han tenido que bajar el precio de la venta de 68 millones de dólares a 52 millones, lo que supone una pérdida de 16 millones de dólares.
Sin embargo, salieron a la luz una fotos en los que los dos artistas parecían estar reconciliados. Lopez y Affleck aparecían en la entrada de su casa y eran muy cercanos entre ellos. Ambos se abrazaron y se dieron un beso, aunque no se vio dónde lo dieron realmente.
La cantante venía de actuar en la boda entre la heredera Netra Mantena y el empresario Vamsi Gadiraju en la India, y Lopez fue la artista principal en toda la velada, en la que cantó temas como Waiting for Tonight y On The Floor. Pero Jennifer Lopez no podía estar alejada de su familia en una noche tan especial para cualquier norteamericano. En sus imágenes de Thanksgiving no muestra a su otro hijo, Maximiliano David Muñiz, que también tiene 17 años y es hijo del cantante Marc Anthony.
De esta forma, la cantante ha podido disfrutar de una velada íntima con sus familiares más cercanos y con un abundante y variado menú para la ocasión. Estas fotografías muestran la cercanía con la que Jennifer Lopez se dirige a sus seguidores, deseándoles a todos ellos que hayan pasado un gran día con sus más allegados.