Lourdes Montes ha hecho una escapada familiar a Galicia. Cuatro años después de hacer el Camino de Santiago junto a su marido, Francisco Rivera, la diseñadora ha regresado para seguir explorando esta tierra que tanto le fascina por sus paisajes, el encanto de sus habitantes y su exquisita gastronomía local. Acompañada de su esposo, sus hijos, sus hermanos y sus cuñados, visitaron lugares tan emblemáticos como el faro de Finisterre, considerado tradicionalmente como el cabo del fin del mundo.
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Entre preciosas e incomparables imágenes, la esposa de Francisco Rivera titula su post "Camiño dos faros", como así se llama la ruta de senderismo de 200 kilómetros que une Malpica con Finisterre bordeando el mar en un recorrido lleno de playas, cabos, calas y faros, entre ellos el Faro de Punta Nariga en Malpica y el de Finisterre, por la Costa da Morte, en A Coruña.
Tras ver el resumen de fotos de su aventura familiar, Sibi Montes respondió a la publicación con un emotivo "os quiero" después de haber compartido unos días inolvidables junto a los suyos. En una de las fotos posa con su marido, Mateo Ibáñez, con el que ha dado la bienvenida este verano a su primer hijo, y su sobrino Curro, el hijo de Lourdes y Francisco Rivera en la cascada de Ézaro, una maravilla natural al ser la única cascada que desemboca directamente en el mar, y tiene aproximadamente una caída de 40 metros de altura, en el municipio de Dumbría.
La familia Montes Parejo también visitó el Faro de Punta Nariga, el más moderno de Galicia, diseñado por el arquitecto César Portela e inaugurado en 1997. Su base triangular alberga un mirador con vistas únicas al mar y a las formaciones rocosas esculpidas por el fuerte viento y las olas. Además, recorrieron el Cementerio de los Ingleses, en Camariñas, un lugar que rinde homenaje a los marineros británicos que perdieron la vida en naufragios en la Costa da Morte.
A esta escapada también se unieron Curro, el hermano de Lourdes y Sibi, con su pareja, María José Fernández Vial. En cambio, los más pequeños de la familia se quedaron en casa: el menor de los Rivera, Nicolás, que tiene apenas siete meses, su primito, el hijo de Sibi Montes, Mateo, que está a punto de cumplir tres meses, y por último el hijo de Curro Montes y María José Fernández Vial, que nació algunos meses antes y celebraron en verano su bautizo. La familia aprovechó para deleitarse con la gastronomía local, especialmente el marisco, y para disfrutar juntos, como muestran las entrañables fotografías compartidas de unos días inolvidables en Galicia.