Rodeados de su familia y sus más íntimos amigos, llena de detalles con mucho significado, música y una celebración con un mágico atardecer como testigo. Así cumplieron Alberto Herrera y Blanca Llandres su sueño de darse el "sí, quiero", el pasado sábado 18 de octubre, tras más de un año de relación y a pocos meses de convertirse en padres por primera vez.
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Poco antes de las doce de la mañana, todas las miradas estaban puestas en la basílica menor de Nuestra Señora de la Caridad, de Sanlúcar de Barrameda. Se trata de un templo del siglo XVIII que es muy especial para el locutor de radio y la psicóloga especializada en recursos humanos y que acoge a la patrona de dicha localidad gaditana, a la que el hijo de los periodistas Mariló Montero y Carlos Herrera siempre ha estado muy unido, ya que guarda muchos recuerdos de sus veranos en la casa que allí tiene su familia.
Había una gran expectación cuando comenzaron a aparecer los primeros invitados al enlace. Por parte de la familia de la novia no faltaron su tío el cantante José Manuel Soto con su mujer, Pilar Parejo, y sus primas Lourdes y Sibi Montes.
Lourdes fue acompañada por dos de sus hijos, Carmen y Curro; su marido, Francisco Rivera, y la hija mayor de este, Tana; mientras que Sibi fue con su marido, Mateo Ibáñez Pacheco.
La gran conexión de la novia y su cuñada
Por parte del novio, su hermana, Rocío Crusset, fue una de las más aclamadas al entrar al templo, con vestido amarillo de Sybilla, y, además, tenía un papel clave en la boda, ya que trabajó en el diseño del vestido de la novia junto al creador sevillano Nicolás Montenegro.
Su padre, Carlos Herrera, y su mujer y compañera de profesión, Pepa Gea, también fueron recibidos con mucho cariño por todos los allí presentes, al igual que el novio, quien no podía ocultar los nervios que sentía mientras, del brazo de su madre, recibía a sus familiares y amigos, entre los que destacaron rostros conocidos como el periodista Goyo González y su mujer, Sara; el cantante Willy Bárcenas, y la periodista Teresa de la Cierva.
Entre los familiares de la novia asistieron el cantante José Manuel Soto y Lourdes Montes con Francisco Rivera
Mariló Montero, que ejerció de madrina y eligió para la ocasión un vestido en tonos azules y turquesas, diseñado en exclusiva por Sybilla, acompañó a su hijo hasta el altar, donde esperaron uno de los grandes momentos del día: la entrada de Blanca junto a su hermano, Carlos, que ejerció de padrino.
Por fin se desvelaba el secreto de su vestido, que, como decíamos, estaba creado mano a mano por Nicolás Montenegro y Rocío Crusset. Se trata de un diseño de corte imperio con escote cuadrado, mangas adherentes y falda con vuelo con una cola de doble capa para la que se han utilizado más de seis metros de bambula de seda. La parte más especial es el corpiño, realizado de manera artesanal con la técnica del drapeado, para el que se han invertido más de 40 horas y cerca de 20 metros de tejido.
"He visto encarnado el amor en la emoción de mi hijo", confesaba a ¡HOLA! Mariló Montero tras el enlace, en el que ejerció de madrina
Las lágrimas del novio
Nada más cruzar sus miradas, Alberto no pudo evitar que se le saltaran las lágrimas. A partir de ahí, las emociones fueron in crescendo durante la ceremonia, que estuvo oficiada por el padre Francisco Varela.
Durante la misa, fueron muy emotivas las intervenciones de los familiares. Desde las lecturas hasta las canciones, porque, con dos familias en las que hay tantos artistas, el cariño hacia los novios se manifestó no solo a través de la palabra, sino también de la música, que ocupó un lugar muy importante bajo la dirección del compositor Manuel Marvizón, acompañado por la Coral del Liceo de Música de Moguer y el coro infantil de la Hermandad de los Dolores.
Carlos Herrera recitó dos poemas, uno de Rubén Darío y otro de Miguel Hernández, y dedicó unas palabras a su hijo, a su nuera y a su futuro nieto —Marcos—, mientras que Mariló leyó una carta del apóstol San Pablo. También habló José Manuel Soto y además cantó, al igual que lo hicieron sus hijos, Jaime, Marcos y Rocío, y el músico Salvador Montero, hermano de Mariló, tocó la flauta y la gaita navarra.
Para Mariló, que ha estado muy involucrada en cada uno de los detalles de la boda de su hijo, ha sido un día cargado de sentimientos y, al ponernos en contacto con ella para preguntarle qué destaca de este gran día, nos respondía sin dudar: "Ver encarnado el amor en la emoción de mi hijo".
Por su parte, a la salida de la iglesia, Carlos Herrera contaba a los periodistas cómo había vivido el "sí, quiero": "No es pasión de padre del contrayente, pero es la ceremonia más hermosa a la que he ido en mi vida".
Baile, música y brindis al atardecer
Ya convertidos en marido y mujer, los recién casados abandonaron la basílica y recibieron las felicitaciones de sus invitados y el cariño de los cientos de personas que los esperaban en la calle. Dando las gracias a todo el mundo y mostrando sus alianzas, se fueron en un clásico Citroën Mehari descapotable de color naranja hasta la Finca Marbella, propiedad de su gran amiga Teresa de la Cierva, donde tuvo lugar la celebración.
Frente al mar y de nuevo con la música como protagonista, con las actuaciones de la familia Soto y Los Alpresa, todos celebraron, bailaron y brindaron hasta el anochecer por la nueva etapa que comienzan Alberto y Blanca, mientras esperan con ilusión la llegada de su primer hijo, prevista para principios de año.
Dos días después, el lunes, Alberto regresaba a la Cadena COPE, como todas las mañanas, ya que su luna de miel aún tendrá que esperar, y hablaba de su boda: "Este fin de semana han pasado cosas… ¡Me he casado! Y yo no me esperaba el interés que ha generado", decía expresando su profundo agradecimiento por todas las muestras de cariño recibidas y destacaba la historia de una mujer que fue desde Zaragoza a Cádiz para verlo.
Como era un día muy especial para él, quiso hablar en una parte del programa sobre el amor, que, aún con las emociones a flor de piel, resumió con la frase de San Pablo que leyó su madre en la ceremonia: "Todo lo que le da sentido a la vida y a la fe es el amor". Y añadía a esta frase en sus redes sociales: "Mi mujer es y será lo mejor que me ha pasado".