La estadounidense Jennifer Lawrence se ha convertido hoy, a sus 35 años, en la figura más joven en recoger el Premio Donostia, la máxima distinción que el Festival de San Sebastián comenzó a entregar en 1986. La actriz, productora y directora estadounidense se ha mostrado “verdaderamente afortunada y fascinada” ante dicha distinción y se ha declarado encantada de participar en un festival en el que “la gente ama de corazón el cine, el arte de contar historias y el alma de las películas”.
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El cineasta J.A. Bayona, presidente del Jurado Oficial, ha sido el encargado de entregarle el galardón a la oscarizada intérprete, de quien ha destacado su “versatilidad prodigiosa”. “Puede ser lo que quiera porque cualquier cosa que haga la llena de verdad”, ha opinado antes de destacar que “más allá de su inmenso talento”, Lawrence “es un imán para el público”. “Con tan solo 35 años, es una de las mayores estrellas de las últimas décadas. Por eso, aunque haya trabajado con decenas de directores, todas sus películas son también ‘una película de Jennifer Lawrence”, ha opinado.
La actriz, por su parte, ha afirmado que un festival como el de San Sebastián da cobijo a historias “de todos los rincones del mundo” y que permiten “aprender sobre los demás, reunirnos en una experiencia emocional compartida y, a veces, darnos cuenta en el momento más indicado de que todos estamos más conectados de lo que podría parecer”.
“Cuando me paro a pensar en artistas que recibieron este honor antes que yo, como la incomparable Meryl Streep, el legendario Pedro Almodóvar y la icónica Lauren Bacall, me siento verdaderamente afortunada y fascinada. Sus contribuciones y su audacia han marcado el cine y me han inspirado durante toda mi vida, tanto personal como creativamente, así que me cuesta mucho asimilar el hecho de ver mi nombre entre los suyos. Gracias, es increíblemente especial, un verdadero honor”, ha concluido antes de recibir un sonoro aplauso en abarrotado Auditorio Kursaal.
En la rueda prensa previa a la ceremonia del Premio Donostia, la estadounidense ha calificado de “genocidio” lo que está ocurriendo en Gaza, algo “inaceptable” ante lo que se siente “aterrorizada”. “Estoy aterrorizada por mis hijos, por todos nuestros hijos. Además, lo que me entristece tanto es que esa falta de respeto y el discurso actual en la política estadounidense va a ser normal para las personas de 18 años que votan por primera vez. Van a normalizar que la política no tenga integridad. Los políticos mienten, no hay empatía y deberíamos recordar que cuando ignoras lo que está sucediendo en un lado del mundo, no pasará mucho tiempo hasta que también llegue a ti”, ha advertido.