Rute Cardoso ha sorprendido este lunes al aparecer en la alfombra roja de la gala del Balón de Oro, celebrada en el Théâtre du Châtelet de París. La joven, viuda del futbolista Diogo Jota, decidió asistir a la ceremonia en la que la futbolista española Aitana Bonmatí se alzó con el Balón de Oro; aunque en el terreno masculino no hubo, finalmente, victoria para el joven Lamine Yamal, que no se fue de vacío al ser galardonado con el Trofeo Kopa.
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No están siendo los meses más sencillos para la joven, que tuvo que enterrar al padre de sus hijos el pasado 5 de julio después de un trágico accidente que acabó con su vida y con la de su hermano, André Felipe Silva. Ambos futbolistas, de 28 y 25 años respectivamente, murieron en la madrugada del 3 de julio tras salirse de la carretera el vehículo de alta gama en el que circulaban en la provincia de Zamora, a escasos kilómetros de su Portugal natal. El Lamborghini en el que viajaban se salió de la carretera, al parecer tras reventar una de las ruedas, y ardió en llamas tras el impacto.
Días después se produjo una de las imágenes más impactantes, pues Rute, apoyada sobre el hombro de su hermana y visiblemente emocionada, lloraba inconsolablemente frente al ataúd de su marido tras la capilla ardiente y la posterior misa que tuvieron lugar en su ciudad natal, la ciudad lusa de Gondomar. Hasta la iglesia de Sao Cosme se desplazaron los compañeros de equipo de su marido, políticos, amigos, familiares e infinidad de personalidades asociadas al mundo del balompié que quisieron darle el último adiós a los futbolistas portugueses.
Juntos tuvieron tres hijos: Dinis, que vino al mundo en 2021, Duarte, en 2023, y una niña nacida en noviembre de 2024 que apenas ha cumplido 9 meses de vida. Rute Cardoso y Diogo Jota se conocían de toda la vida. Sus caminos se cruzaron siendo adolescentes en el instituto de Oporto y desde entonces eran inseparables. Mantuvieron una relación que duró más de doce años, marcada por la complicidad y el apoyo mutuo durante toda la carrera deportiva de Jota. La pareja formalizó su compromiso en julio de 2022 y se casó tres años después, el 22 de junio de 2025, en una ceremonia íntima en la ciudad lusa en la que iniciaron su romance, apenas once días antes del trágico accidente.
La joven viuda estaba completamente "devastada, rodeada del amor de sus seres queridos, pero sumida en un dolor indescriptible", tal y como recogía el breve comunicado emitido por la familia. Los padres, Joaquim e Isabel, también pasaron un duro trago, pues tuvieron que despedir a sus dos hijos a la vez. Tras el verano más duro de sus vidas, Rute y compañía están dando pequeños pasos para seguir adelante tras la insondable tragedia, y para mantener viva la memoria de ambos futbolistas. Su aparición este lunes en París atestigua dicho compromiso, también por parte de las instituciones.
No en vano, la gala de este lunes rindió un sentido homenaje a Diogo y André, con Rute presente entre el público. "Este verano, la familia del fútbol quedó conmocionada al conocer la noticia del fallecimiento de Diogo Jota, quien perdió la vida junto a su hermano, Andre Silva", dijo Kate Scott, quien presentó la ceremonia junto a la Ruud Gullit. El futbolista holandés, leyenda del deporte, añadió: "Jota era uno de los favoritos de la afición, lo daba todo por su club y su selección, y era querido por sus compañeros y seguidores. Recordémoslos juntos". Fue entonces cuando el teatro enmudeció para ver algunos vídeos que recopilaban los mejores momentos de ambos. "Sabemos que sus familias están aquí con nosotros esta noche, así que solo queremos decirles que sentimos mucho su pérdida", dijo Scott.