Fue a finales del verano de 2022 cuando vimos por primera vez a Isabel Preysler disfrutando de un chocolate con churros, en Marbella, y publicamos las imágenes en nuestras páginas. Fue una escena que, a pesar de ser muy común para el resto de los mortales, llamó mucho la atención porque la hizo humana. La mujer más elegante de nuestro país, siempre divina y ejemplo de una alimentación sana, demostraba que, de vez en cuando, también caía en la tentación.
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Por todos es sabido, y a la vista está, que Isabel es una mujer que se cuida muchísimo por dentro y por fuera y por eso parece que por ella no pasan los años como para el resto de los humanos. Sus hijas siempre subrayan que el mayor secreto de belleza de su madre, además de una buena genética, es que es muy disciplinada con su alimentación, sus rutinas de deporte, sus tratamientos "beauty"… Y aunque siempre ha dicho que el chocolate le encanta y lo come casi todos los días y que lo que más le gusta en el mundo es el chocolate con churros, todos pensábamos que, quizá, no podría ser del todo cierto y que del dicho al hecho, al final, habría un gran trecho. Pero el hecho aquí, que se demuestra con imágenes, es que Isabel sí come churros y porras con chocolate, y esta dulce afición se ha convertido ya en una tradición a la que no falta cada verano.
A su regreso de su viaje de ensueño con su hija Tamara e Iñigo Onieva a Maldivas, Isabel puso rumbo a Marbella, donde acude cada año, y repitió una imagen que ya vimos el verano pasado: se dio cita en la churrería Marbella 2, ubicada en la plaza de la Victoria, con sus amigas Ana Cristina Nassi y Amalia Amusátegui. Juntas pasaron una dulce tarde entre chocolate, churros y porras, mientras se ponían al día de su verano y compartían risas y confidencias y, después, dieron un paseo y entraron a ver varias tiendas de la zona. Para la ocasión, eligió un maxivestido cruzado en color blanco, estilo caftán, con detalles en rojo y cinturón a juego que combinó con sandalias de tacón medio.
Sus remedios "detox"
Isabel es la prueba de que una dieta sana y equilibrada no está reñida con tomar un dulce de vez en cuando. Ella nos ha confesado en más de una ocasión que es muy golosa y que no sale de casa sin llevar chocolate negro en el bolso. Además, el chocolate negro tiene muchas propiedades y es un buen antioxidante. Todo es saber contrarrestar los excesos de azúcar. Entre los trucos de Isabel para cuidar su dieta están los domingos de "detox", en los que suele hacer una receta filipina que se llama tinola, que es una sopa hecha de pollo, verduras y algunas especias, además de sus famosos batido verde "detox", a base de fruta y verduras.