El día en que Mick Jagger cumplió 82 años no solo fue una celebración más en su larga y agitada vida, sino también el reflejo de la calma y la plenitud que vive desde hace más de una década al lado de Melanie Hamrick, la exbailarina y escritora de 38 años con quien comparte su presente más familiar y estable. Rodeado por sus hijos, nietos y hasta algunas de sus exparejas más emblemáticas —como Jerry Hall, madre de cuatro de sus ocho hijos—, el líder de los Rolling Stones festejó en Londres en un ambiente tan cercano como armónico. En el corazón de esa celebración estaba Melanie, quien no solo asistió al evento en los lujosos Kensington Roof Gardens, sino que, según los presentes, fue quien coordinó buena parte de la logística con una elegancia discreta y una naturalidad diplomática que ha sido clave en su integración con el extenso clan Jagger.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 5 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 5 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
La historia entre Mick y Melanie comenzó en 2014 en Japón, cuando ella, por entonces bailarina principal del American Ballet Theatre, coincidió con él durante una gira. "Tal vez hubo una chispa, pero nada increíble. Ni siquiera intercambiamos teléfonos", confesó ella en una entrevista. Sin embargo, cuatro meses más tarde, Jagger la invitó a unirse a él en Zúrich, y desde entonces no se han separado. En 2016 nació su hijo en común, Deveraux Octavian Basil Jagger, a quien llaman cariñosamente “Devi”. El pequeño, de ocho años, ha heredado el talento de sus padres y, según Melanie, ya da muestras de gran soltura artística: “Es alucinante. Está en sus genes. Él simplemente… se mueve”, contaba entre risas. “Nadie le enseñó. Nadie le influenció. Se movía así antes de ver siquiera uno de los conciertos de su padre”.
Melanie ha encontrado en esta etapa una nueva vocación. Retirada del ballet desde 2019, ahora es escritora y ha publicado dos novelas ambientadas en el mundo de la danza. Actualmente trabaja en su tercer libro, una reinterpretación contemporánea del clásico Giselle. “Es un gran proyecto… un poco distinto a los anteriores, así que llevará algo de tiempo”, confesaba recientemente.
Aunque nunca han formalizado su relación con una boda, la pareja está comprometida desde hace “dos o tres años”, según reveló la propia Melanie. “Quizá algún día nos casemos, quizá no. Somos tan felices con nuestra vida actual que me daría miedo cambiar algo”, dijo a Paris Match. Una visión serena del amor que también refleja su filosofía cotidiana: “Tratamos de apoyarnos, de estar ahí el uno para el otro y de asegurarnos de que todos somos felices. Eso es lo único que me importa y lo único por lo que lucho”.
Sobre su diferencia de edad —44 años—, Melanie responde con sentido del humor: “¡Él es más joven que yo!”, bromeó en el Spring Gala del New York City Ballet. “Es increíble, de verdad lo es”, añadió entre risas. La complicidad entre ellos es tan evidente que incluso los rumores habituales en torno al pasado amoroso de Jagger no parecen afectarle. “Me siento muy segura en mi relación. Siempre habrá rumores, pero sé lo que tenemos Mick y yo, así que no les presto atención”, confesó.
Lo cierto es que Melanie ha sabido integrarse en el universo Jagger con una inteligencia y una sutileza que no pasan desapercibidas. Se lleva bien con Jerry Hall y con los hijos del cantante. “Ha hecho el esfuerzo de conocerlos a todos y ellos la aprecian”, comenta una fuente cercana. “Tiene una habilidad diplomática impresionante”.
La pareja divide su tiempo entre Londres, París y el Château de La Fourchette, la propiedad que Mick posee en el valle del Loira, donde llevan una vida tranquila y familiar. Melanie está aprendiendo francés, idioma que Mick domina y que también habla su hijo. “Pasan casi todo el tiempo juntos. Tienen una vida real de familia”, añade la misma fuente. El recuerdo de L’Wren Scott, la diseñadora que compartió vida con Mick y falleció trágicamente en 2014, también forma parte de su historia. La casa de París que hoy comparte con Melanie fue diseñada por L’Wren, y cada abril, Jagger le rinde homenaje públicamente en redes sociales. Es un gesto que dice mucho del respeto y sensibilidad que existen en su entorno actual.
Melanie, por su parte, ha sabido encontrar su lugar sin invadir el de nadie. “No soy una persona que exija. Me gusta ser su pareja. No le presiono con el tema del matrimonio, no es una prioridad para mí”, aseguraba. ¿Y un segundo hijo? La pregunta ha empezado a surgir en su círculo más cercano. “Han hablado de la posibilidad de tener otro bebé… si el destino lo permite”, aseguran amigos del músico. A sus 82 años, Jagger, quien solo ha estado casado una vez —con Bianca en 1971—, parece haber encontrado una estabilidad que nunca antes había disfrutado.