Ha dormido apenas unas horas porque está en pleno proceso promocional y a la vez prepara su exigente gira de conciertos, pero lo primero que encontramos al ver a India Martínez es una enorme sonrisa que habla por sí sola. Su mirada está llena de verdad y cada una de sus palabras transmiten una serenidad propia de quien está viviendo una de las mejores etapas. Es feliz con lo que hace, y eso se nota. Se siente una privilegiada de haber convertido su pasión en su profesión y cuenta con el apoyo de su círculo para seguir soñando a lo grande, porque es la única manera en la que concibe hacerlo. Además, lleva un año teniendo a su hermana Deseada como parte del equipo y tener al lado a uno de sus pilares findamentales es vital, especialmente en estos momentos en los que el ritmo es frenético. Tras más de dos décadas de carrera (y otros tantos usando la música como su forma de expresión), la cantante andaluza sigue sintiendo la magia de las primeras veces, como se refleja al hablar de Aguachile, su décimo disco, un trabajo inspirado en sus viajes a México. A lo largo de diez canciones sorprende con nuevos códigos, y lo hace tras conquistar al público con First love, una fusión de rap y flamenco en la que une su talento con el de Will Smith. De la sorprendente colaboración con el ganador de un Oscar, de cómo se adentró en la música y de esa parte más desconocida de su vida habla con ¡HOLA!
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
India, tu nuevo disco trae sonidos nuevos, es el décimo de tu carrera y parece que marca el inicio de una nueva era. ¿Es un cambio o una continuidad?
Es una continuidad a mi carrera. Son diez discos ya, y cada disco para mí refleja en el momento en el que me encuentro personalmente. Cuenta vivencias, viajes, influencias... Y en estas influencias y en estos viajes está México. Entonces, quieras que no, musicalmente me influye muchísimo. Yo trato cada álbum desde cero, partiendo de mi voz y de mi esencia, a donde me lleve, y este disco me ha llevado allí.
Escucharlo es como un viaje al México más profundo, no a las rancheras que todos conocemos, sino a la raíz
Son regionales mexicanas y son diferentes estilos, como el corrido tumbao, que también está muy de actualidad allí, el sonido norteño, sierreño, el bolero, la banda... Es un trabajo de búsqueda y de investigar un poquito sobre eso, ¿no? De empaparme un poquito de verdad, de la raíz auténtica
¿Cómo ha sido el proceso de preparación del disco? Porque de los diez temas, ocho los has compuesto tú personalmente
En este caso, al estar viviendo en España, pues se ha hecho un poco más complicado, más viajes aún....Me he ido por temporadas y me he quedado por allí para conocer a compañeros, músicos, compositores que se han sumado al proyecto, cantantes... En cada viaje, pues a lo mejor he compuesto dos o tres canciones. Bueno, muchas más, porque a lo mejor en una o dos semanas allí salían seis o siete canciones. Pero después, en una totalidad de 20 o 25, hemos seleccionado esas
¿Buscas algún momento concreto para componer?
En cualquier momento surge alguna idea y me la dejo anotada. Tanto si es una nota de voz o un texto, pero después me siento, porque la inspiración viene trabajando. La mayoría de las veces se han forjado en casa de algún amigo mexicano, en el estudio, en Ciudad de México, o Mazatlán, o Miami, por ahí donde me he estado moviendo.
Aguachile, que es el nombre de tu disco, es una comida típica mexicana, ¿tú eres muy conocinillas?
No tengo una variedad amplia de platos que preparar, pero los que preparo me salen muy bien siempre y me gusta. El aguachile no lo he preparado nunca, la verdad, pero tengo ganas de animarme. Y cuando lo haga me voy a juntar con los mejores para que me enseñen bien.
Si miramos atrás después de diez discos, ¿cuál es el secreto del éxito? No todos los artistas consiguen sobrevivir en este mundo tan exigente
No es fácil, no, pero no hay secreto ni fórmula. Además, el éxito para cada persona es relativo. Para mí, el éxito es seguir dedicándome a esto y personalmente cuidar a mi gente y mi entorno. Buscar ese equilibrio de ambas cosas que te provocan paz y felicidad. Para mí ese es el éxito, el cada día no necesitar más, sino ser feliz con lo que tengo y con lo que voy consiguiendo. Yo me pongo metas muy altas, retos a veces casi inalcanzables. Sueño siempre a lo grande, pero el hecho de no lograrlo, no me lo tomo como un fracaso, sino como que no estaba para mí y he encontrado otras cosas en el camino que a lo mejor me han hecho más feliz.
Muy comentada ha sido en los últimos meses tu famosísima colaboración con Will Smith, ¿nos cuentas la intrahistoria?
Nos conocimos el verano pasado de forma casual en la gala solidaria de Starlite en Marbella. Yo abría la gala cantando y me daban un premio y él entregaba un premio también esa noche. Me acerqué a la mesa cantando y estaba visiblemente emocionado. Esa misma noche nos conocimos. Se me acercó y me dijo que si quería cantar con él. Esa misma noche fue todo, aunque yo no lo conté en el momento.
No se quedó entonces en la típica frase de 'a ver si hacemos una colaboración'...
Fue directo. Al día siguiente me dijeron, nos vemos en tres días. Fue súperrápido. Daba la casualidad de que estaban trabajando en el disco y estaban grabando en Ibiza, así que me fui para Ibiza. Me invitaron y allí nos conocimos un poquito más.
¿Él se adentró en el mundo del flamenco por ti o era algo que ya a él le interesaba?
Yo me adentré en el mundo del flamenco por él
¿Cómo es eso? Explícanos
Porque la propuesta era esa. La propuesta era una canción más o menos ya armada, una estructura donde él quería que sonasen cadencias flamenca y ya estaba haciendo esa mezcla de bulería con rap. Estaba muy claro hacia dónde lo q'uería llevar y yo simplemente rematé la canción. Le dimos forma y compuse esas letras y esa adaptación, pero él quería eso y lo vio en mí. Cuando me vio esa noche cantando dijo, 'eso es lo que quiero'. Por eso me invitó y fluyó tan bonito. Nos entendimos perfectamente
¿Sigues teniendo contacto con él?
Sí, claro.
¿Y cómo es en las distancias cortas?
Es una persona muy especial. Tiene muchísima luz, una bonita energía y mucha verdad en lo que dice, en lo que hace. Me lo ha demostrado todo el rato. En sus palabras es muy pasional.
Estás inmersa en una gira de conciertos, ¿cómo te preparas para ese ritmo frenético?
Aunque uno se intenta preparar, nunca es suficiente. Esta vez me ha pillado el toro. He ido diez días a México y me he resfriado en el camino, me han bajado las defensas y me ha pillado un virus que me ha destrozado, me ha dejado dos días en cama. Y tenía un concierto al día siguiente. O sea, por más que te prepares y tú te creas que estás bien, la vida te hace ¡pum! Y te pone en tu sitio.
Lo importante es que superas todos esos obstáculos
Menos mal. Yo intento comer bien, descansar al máximo, hacer deporte y no preocuparme demasiado por las cosas. Esa es mi rutina, lo que pasa es que hay días intensos, como estos quince días que llevamos seguidos, que llevo una media de tres o cuatro horas durmiendo y yo no soy persona.
En esta agenda intensa que llevas, ¿cómo lo compaginas con tu vida personal?
Es complicado a veces, sobre todo porque hay temporadas intensas que te trastocan el ritmo de vida, pero yo llevo muchos años en esto y me conocen así. La más cercana que tengo es mi hermana Deseada, que acompaña y lo vive de primera mano. La llevo arrastrada, sé está enterando bien de lo que es esto (risas). El año pasado se incorporó al proyecto y me decía, 'qué verano más intenso' .Y yo le decía, no, siempre es así. El encuentro el año pasado con Will Smith fue entre conciertos. El 2 de agosto canté en Jerez, el 3 en Sotogrande, el 4 en Starlite pasó eso, el 9 tenía concierto en Málaga y el 10 tenía que ir a Ibiza para componer. Fuimos, yo durmiendo una hora y ella ninguna. Llegamos y todo el día entero, hasta la noche. Desayunando, almorzando, cenando juntos, todos con Will y con todo el equipo... Encima emocionalmente yo decía, ¿esto que es? La adrenalina ahí a tope. Al día siguiente tenía un concierto que casi ni llegamos, en Matalascañas, en Huelva. Y al día siguiente nos fuimos para China una semana que me pasé ensayando a tope. Qué locura.
¿Cómo llegó la música a tu vida?
Mi abuelo y mis tíos siempre me han acompañado de guitarra y de cante, de flamenco, en las reuniones familiares. Por ahí es como que empieza a llegar todo. Pero desde muy pequeñita, antes de escuchar a nadie, simplemente escuchando la radio, yo recreaba las canciones. Desde los dos añitos ya se notaba que cantar y bailar era mi manera de expresarme.
Participaste con doce años en Veo veo, un concurso infantil, y desde entonces no has parado. ¿Cómo se gestiona todo eso en la juventud?
Ahí más que el éxito, lo que empecé a tener es una profesión ya más seria. No era fama. Lo compaginaba con los estudios y la formación, pero para mí era una dedicación plena, una afición y un juego prácticamente. Con el tiempo, como ha sido todo progresivo, he ido todo asimilándolo poco a poco.
¿Y cambiarías algo de todo lo que has vivido? ¿Lo harías de otra manera?
No cambiaría nada, si no, no sería la persona que soy hoy en día. Todo lo que ha ido pasando en mi vida tiene un sentido y lleva un aprendizaje de la mano. Gracias a una cosa que nos ha pasado, que creemos que es un fracaso, gracias a eso nos pasa otra cosa. No cambiaría nada y volvería a nacer donde he nacido, incluso aunque a veces digo 'si hubiera nacido con una herencia o en un lugar más tranquilo y de equilibrio...'. Pero a lo mejor eso no me haría pisar el suelo como lo hago y no tendría los valores que tengo.
¿Qué consejo le darías a niños que sueñan con dedicarse a la música y se presentan a programas como el que tú fuiste?
Que utilice los talents solamente como una plataforma más, como una base de trabajo, que no sea algo crucial en sus carreras, que les den tiempo a cada cosa, que no tengan prisa, pero que sean constantes, que vayan a por todas y que le dediquen eso todo el tiempo que tengan posible, porque siempre van a tener muchas más posibilidades de ser más bueno que otro que no le dedica tanto.
Tienes un Goya y has participado en Jaguar, serie de Netflix, ¿te gustaría seguir tirando por ese camino de la interpretación?
.¿Por qué no? No lo descarto. Si hay alguna propuesta de cine o de teatro, yo la valoro, y si entra dentro de mis planes, mis posibilidades y mis gustos, pues bienvenido. La verdad es que me gusta mucho.
¿Cómo es India Martínez cuando nadie la ve?
Eso te lo puede decir mi hermana.
Deseada: Se transforma. Es muy humilde y totalmente desenfadada, va con su chándal, sin maquillaje... Muy natural. Se transforma en el escenario, pero luego es muy ella.
India: Me dicen todo el rato que parezco un niño, hasta mi pareja me lo dice. Pero es porque me da igual, no busco una pose ni nada. Soy un híbrido (risas)
-A finales de 2025 cumlplirás 40, ¿eres de celebrarlo a lo grande?
Yo celebro cada año y ese es un número más. Mucha gente lo tiene muy cuenta, pero yo ni me acuerdo de mi edad, me siento igual todo el rato. No me gusta encasillarme ni en estilos, ni en música ni en edad, porque cada uno tiene la edad que se merece, tal como siente y piensa. Me gusta ser atemporal la verdad.