Es la actriz del momento. Tras seis años apartada de Hollywood, una decisión que tomó después de que su impactante cambio físico se convirtiera en el foco mediático, Renée Zellweger regresaba al cine en 2016 dando vida, por tercera vez, a la inolvidable Bridget Jones. Tres años después y varias producciones por el camino, la texana no solo ha recuperado su trono entre las preferidas del público, sino que se ha ganado -con un solo papel, el de Judy Garland- el gran reconocimiento que avalan los cuatro premios más importantes de la industria cinematográfica. A sus BAFTA, Globo de Oro y Premio del Sindicato de Actores, este domingo sumaba el codiciado Oscar a mejor actriz.