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Rafael Nadal y Mery Perelló ya son oficialmente marqueses de Llevant de Mallorca, una concesión del rey Felipe VI que refuerza el vínculo entre el tenista y su tierra natal y reconoce “su extraordinaria trayectoria deportiva y su contribución al prestigio internacional de España”, según fuentes de la Casa Real. Con 14 títulos en Roland Garros –más que ningún otro jugador en la historia del torneo– y 22 torneos de Grand Slam, Nadal es uno de los iconos del deporte español y mundial y su distinción subraya el fuerte arraigo que tanto él como su familia mantienen con la comarca del Llevant. En el este de la isla de Mallorca, es el epicentro de su vida personal y profesional.
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Pero ¿qué comprende esta comarca que ahora da nombre al nuevo título nobiliario y qué puedes descubrir en ella? Lo primero que tienes que saber es que Llevant es uno de los rincones más auténticos y menos masificados de la isla. Manacor es la ciudad natal del tenista y el lugar que lleva con orgullo por el mundo. Aquí está la Rafa Nadal Academy y su museo, que el tenista añadió a su lista de imprescindibles.
Manacor también es conocida por la fábrica de perlas Majorica, que se puede visitar, por su mercado artesanal de los sábados en Sa Bassa –punto de encuentro de los manacoríes–, sus plazas adornadas de casonas señoriales y por sus 27 kilómetros de litoral de los que Rafa Nadal disfruta, porque su casa está en Porto Cristo, un pequeño y encantador núcleo costero, en cuyo puerto tiene amarrado su yate.
Luego están sus playas del municipio, desde Cala Moreira, en el punto más septentrional; a la más recóndita de Cala Moreira, en la que se puede bucear y hacer surf; y otras como Cala Murada o s’Estany d’en Mas (cala Romantica) están enmarcadas en un precioso entorno.
CUEVAS DEL DRACH Y DELS HAMS
A pocos minutos de Porto Cristo se esconden dos maravillas subterráneas: las Cuevas del Drach y las Cuevas dels Hams. Las primeras son famosas no solo por sus formaciones geológicas, sino por permitir un paseo en barca por el lago Martel, uno de los mayores lagos subterráneos del mundo, y por sus conciertos de música clásica bajo tierra (cuevasdeldrach.com). Muy cerca, las Cuevas dels Hams (cuevasdelhams.com) compiten en belleza, con curiosas formaciones en forma de anzuelo que les dan nombre.
LA PENÍNSULA DE ARTÀ
De la comarca de la que Rafa Nadal y Mery Perelló ya son marqueses también forma parte la península de Artá, al noroeste de la isla, y sus 24 kilómetros de costa virgen con una gran variedad de paisajes y yacimientos arqueológicos, entre los que se encuentran los poblados talayólicos de Claper des Gegants y Ses Païses. Acantilados, torrentes, montañas, calas, bosques, cuevas, torres defensivas y miradores embellecen el Parque Natural de la Península de Llevant. En sus paisajes kársticos crecen especies endémicas, como el palmito, con el que se elaboran productos artesanales desde antaño.
El bien más preciado del parque es la playa de S´Arenalet des Verger, de las más vírgenes del archipiélago debido a su difícil acceso, pero a lo largo del litoral de Artá se suceden otros 25 fabulosos arenales, entre las que se encuentran algunas de las más bonitas de la isla: Son Serra de Marina, la más turística de cala Rajada, cala Mesquida…
El cerro de San Salvador, con su santuario fortificado, domina el pueblo de Artá, auténtico por sus calles y casas de piedra con coloridas ventanas, sus restaurantes donde comer arroz y otros platos de la tierra y su tradicional mercado lleno de cestas y capazos trenzados con palmito y productos de la cocida local, como la sobrasada o los quesos.
MUCHO POR DESCUBRIR (Y SABOREAR) EN CAPDEPERA
Las maravillas de Artà también están bajo tierra. A 6 kilómetros del pueblo, ya en el municipio de Capdepera, se encuentran las cuevas de Artá, con formaciones que fascinan por su tamaño y formas, sobre todo la estalagmita de 22 metros conocida como Reina de las Columnas. La experiencia final no puede ser más especial: la vista privilegiada sobre la bahía de Canyamel.
No es lo único por lo que destaca Capdepera, también por su castillo, vigía desde una colina la península; por el faro, que guía a las embarcaciones que navegan por el canal que separa la isla de Menorca en su punto más estrecho; y porque en Canyamel se encuentra Voro (vororestaurant.com), el único restaurante de Mallorca con dos estrellas Michelin, con el joven chef Álvaro Salazar al frente.
SANT LLORENÇ DES CARDASSAR Y SON SERVERA, EN EL INTERIOR DE LA COMARCA
En el interior del Llevant mallorquín, entre el campo y el mar, Sant Llorenç des Cardassar y Son Servera conservan el encanto de los pueblos tranquilos, con casas de piedra, molinos antiguos y un ritmo pausado de los que parten caminos rurales y rutas ciclistas entre campos de almendros, como la Vía Verda. A pocos kilómetros, sus núcleos costeros como Cala Millor o Sa Coma ofrecen playas amplias y aguas turquesa.
PASIÓN POR EL GOLF
La comarca de Llevant es también un destino destacado para los amantes del golf, un deporte del que Rafa Nadal también es un gran aficionado. En su tierra natal tiene el entorno perfecto para practicarlo, con varios campos de primer nivel, como Pula Golf Resort, en Son Servera, sede de torneos del European Tour; Capdepera Golf, rodeado de montañas; el panorámico Canyamel Golf y el Club de Golf Son Servera, el segundo más antiguo de la isla, junto al mar y entre pinares. Una muestra más de que el Llevant mallorquín es tierra de grandes deportistas.