Aunque su camino comenzó como modelo con tan solo 14 años de edad, Laura Archbold, por cuyas venas corre sangre de artista (su mamá es escritora, su papá toca el saxofón y su hermano es productor musical), siempre supo que quería dedicarse a la actuación. Lo que comenzó como una audición de modelos durante una visita a una cadena de televisión, terminó convirtiéndose en un casting para su primer proyecto de actuación. Tras la filmación de su más reciente proyecto: ‘Ana de Nadie’ una de las telenovelas con mayor éxito en su país natal, la modelo y actriz disfrutó unos días de descanso en Ciudad de México, por lo que aprovechamos la ocasión para encontrarnos en el hotel Mondrian Condesa Mexico City, hasta donde llegó ataviada en un look de modelo off duty al estilo Gwyneth Paltrow de la década de los 90 compuesto de una sofisticada y minimalista camisa blanca, pantalones negros y flats. Allí, tras una taza de café, Laura, con una sencillez abrumadora y una belleza que atrae todas las miradas, nos contó sobre su paso por la moda, los concursos de belleza, sus elecciones de estilo y sus planes a futuro.
“Fui una mujer muy tímida y no sabía cómo recibir el reconocimiento. Ya he hecho las paces con eso, ya lo acepto, pero tampoco quisiera creer que eso es lo importante, porque no lo es”
Vengo de una isla en el Caribe que se llama San Andrés, en Colombia. Nací, crecí, y viví allá hasta los 18 años. San Andrés es un lugar maravilloso; tiene el mar de los siete colores, de los arrecifes más grandes del mundo después del de Australia y después de la barrera de México. Es perfecto para bucear. Parece como sacado de un cuento de hadas. Yo soy de mar completamente, y me hace falta siempre que me siento mal.
Artistas de alma y de corazón. Mi mamá es escritora; mi papá es abogado, pero siempre ha sido un amante del arte y tocaba el saxofón. Hay una Feria del Libro y un encuentro de escritores que tenemos en mi casa desde hace muchísimos años y que ha estado expandiéndose en los últimos años. Mi hermano es productor musical y bueno, yo salí también torcida (risas).
Empecé a modelar cuando tenía como 14 años. Yo vivía en San Andrés y por un dolor de espalda tuve que viajar a Bogotá, hacerme exámenes y después fui a un almuerzo con los amigos de mis papás y ahí estaba la dueña de lo que entonces era Wilhelmina Colombia. Ella se llamaba Natalia, y me dijo “¿Quieres modelar? Eres muy bonita” y dije que sí. A mi mamá no le pareció mucho la idea, pero a mí sí (ríe). Ahí empezó el camino, pero fue muy raro porque yo nunca fui una mujer extrovertida, todo lo contrario, yo era muy penosa. Creo que todavía lo soy, aunque no parezca.
Nunca estuve muy relacionada con los certámenes de belleza y en mi casa, como que tampoco se le prestaba mucha atención, pero me lo empezaron a proponer. Dije que no varias veces, me fui a vivir a Inglaterra y regresé. Estudié Diseño Industrial en Bogotá…
Sí. Logré terminar la carrera. Entre tanto, acepté la idea de participar en el certamen de belleza y estoy muy agradecida porque la timidez se me quitó gracias a eso.
Si hubiese sido más inteligente en esos momentos lo hubiera podido usar como plataforma, pero yo salí despavorida de Colombia después del concurso, como que sentía que tenía mucha atención que no merecía. No gané, pero fui de las favoritas y empecé a tener mucho reconocimiento. Después del certamen me vine para México a modelar y estuve aquí como 6 meses. Siento que perdí ese cuarto de hora que hubiera tenido en Colombia, pero después regresé a Bogotá y seguí con mi carrera de Diseño Industrial. Y realmente después empecé a actuar, pero fue coincidencia, no fue por el concurso.
Me llamó un día Fer (mi mánager) y me dice: “Laura, hay un casting de modelaje en la agencia de Caracol”. Y pues yo me fui a la audición. Cuando se terminó, unos amigos míos que trabajaban allá me invitaron a almorzar y me preguntaron de mis planes. Les dije que estaba estudiando pero que durante mis vacaciones me iba a ir a estudiar actuación a Nueva York, algo que siempre había querido hacer, y ahí quedó. A la semana me llamó uno de esos amigos y me dice, “Lau, están haciendo un casting acá en el canal y nos preguntaron si conocíamos talento nuevo, y como tú me dijiste que querías actuar, yo dije que sí”. Yo no quise en un principio, pero mi amiga me dijo que lo peor que podía pasar es que me diera cuenta de que era muy mala y bueno, historia larga hecha corta, fui, hice la audición y me quedé.
Una telenovela que se llama “Niche”. Eso ya hace 10 años. Y nunca me pude ir a estudiar actuación, pero sigo creyendo en la Academia. A lo largo de los años, cada vez que tengo tiempo, si veo que hay un curso, me inscribo. Está bien ser intuitivo, pero yo siento que la intuición es un músculo que se desgasta y si no se tienen las herramientas, te vas a quedar corto, entonces si hay que hay que estudiar.
“Ana de Nadie fue un proyecto que física y emocionalmente me drenó mucho. Ahora estoy disfrutándome y en la búsqueda de papeles que me diviertan y emocionen”.
Fue un proyecto que física y emocionalmente me drenó mucho. Fue muy largo, estuvimos seis meses grabando de lunes a sábado 12 horas diarias. Entonces necesitaba un descanso. Ahora mismo estoy disfrutándome y en la búsqueda de proyectos que me diviertan mucho y que me emocionen, haciendo castings deliciosos que me llenan y fuera de la actuación sigo modelando y trabajando con marcas fijas.
Sí, que maravilla que nos dedicamos a lo mismo y podamos estar acá.
Diego y yo estamos juntos hace casi 9 años. Trabajando en la relación día a día, como cualquier pareja. Lo que más nos gusta hacer juntos es viajar, hablar hasta tarde, escuchar música y viajar.
Laura Archbold y la moda: Su estilo personal y firmas favoritas
Me gusta Johanna Ortiz, Leal Daccarett y Stevan Barrera, que hace cosas increíbles. Hay muy buenas marcas como Studio F, con quienes trabajo, que también hacen cosas espectaculares.
Si yo me siento cómoda, me siento fantástica, me siento poderosa, me siento bella. Podría decirte de los básicos que uso, que son jeans, el color blanco y el negro y unos tacones cómodos. Tampoco quiero catalogar la comodidad como un estilo porque puedo sentirme cómoda en un vestido de lentejuelas y unos tacones muy altos. Me gusta la ropa ancha y sobre todo telas que se sienten bien en la piel.
Chanel, por supuesto, y hay una marca mexicana que me gusta mucho que se llama HUA porque es justo una marca cómoda y que siento que le va bien a todo el mundo.
Cuando tengo tiempo quiero pasar la mayor cantidad de tiempo posible con mi familia, ver a mis papás…. Cuando uno va creciendo quiere aprovecharlos más y más y más. Eso y hacer ejercicio, leer, viajar…. Me encanta, soy fan de cualquier viaje: largos, cortos, a ciudades o Naturaleza.
Look blanco en foto principal: Top y pantalón, de Sandra Weil; collar, de Metric Accessories.
Fotos: REY TUK
Coordinación de moda: CHIARA PRIMATESTA
Asistente de moda: REGINA AGUNDIS
Locación: HOTEL MONDRIAN CONDESA MEXICO CITY