Tras quedar como la primera finalista en Miss Universo 2021, la vida de Nadia Ferreira dio un giro. A pesar de que no ganó la corona, se llevó el cariño de millones de personas y usó el certamen a su favor, para posicionarse como una de las modelos más reconocidas y tener una voz para seguir apoyando las causas cercanas a su corazón. En medio de esta oleada de éxitos, el amor la sorprendió. En una reciente entrevista con LEVEL, la paraguaya de 23 años habló sobre su relación con Marc Anthony , quien en mayo pasado le pidió matrimonio.

“Marc llegó completamente de sorpresa, el amor tocó mi puerta y lo dejé pasar. Me encuentro más feliz y bendecida que nunca”, reveló Nadia, agregando que aún no tienen una fecha definida para su boda.

El sentimiento es mutuo, pues Marc también se ha dejado ver pleno al lado de Nadia y por si fuera poco, recién agregaron a su familia al pequeño Blue , un cachorro de raza Pomerania, el cual ya es toda una celebridad como sus padres, pues tiene su propia cuenta de Instagram y lleva los apellidos de ambos, @bluemunizferreira.

Desde que comenzó su carrera en el modelaje, Nadia ha estado bajo los reflectores. La atención sobre ella incrementó con su paso por Miss Universo, y ahora, el ojo público está sobre ella por su relación con el salsero, quien es mayor que ella por 30 años. Al respecto, la originaria de Villa Rica habló de cómo maneja la fama y la atención de los medios. “El hecho de haber empezado a trabajar en los medios desde muy pequeña me ayudó a madurar antes de tiempo. Algo con lo que tenemos que lidiar las figuras públicas es la presión”, indicó.

“Estoy abierta a aprender diariamente, enfocarme en lo positivo y tratar de ser un ejemplo de bien para otras personas. Somos seres humanos y no existe la perfección, pero sí puedo decir que me interesa dejar un legado positivo”.

Sus batallas siendo una niña

En esa conversación, Nadia también habló acerca de las adversidades que enfrentó desde que era tan solo una bebé. Ferreira nació con tortícolis congénita, la cual la llevó a pasar por una cirugía a los ocho meses de nacida. Más adelante, con 10 años, enfrentó otra condición que dificultó su movilidad y el habla. Esos retos no fueron impedimento para que siguiera adelante y conquistara sus sueños.

“Siempre digo que mi vida es un milagro de Dios, el haber pasado por dos enfermedades difíciles, una de ellas de vida o muerte, no ha sido nada fácil para mí ni mi familia”, reveló la modelo. “Fueron años de tratamiento, pero estas dificultades nunca me impidieron soñar y cumplir con mis propósitos, sino, al contrario, me hicieron una mujer fuerte, capaz de superar todas las adversidades de la vida y nunca rendirme”.