El nombre de este bello pueblo amurallado es un ineludible referente para los amantes del vino, en cuyas bodegas se elaboran algunos de los mejores caldos del mundo. Pero Saint-Émilion es también una pequeña joya monumental llena de rincones de lo más fotográfico para descubrir con calma a menos de una hora de Burdeos. Nos ha encantado.
13/09/2018 13:49 UTC Por ESPERANZA MORENO